Una vuelta por Venado Vinos y Gourmet!

Por Rumbovino @rumbovino

Como habíamos anunciado, los días 9 y 10 de mayo se celebró en Venado Tuerto la segunda edición de la Feria Venado Vinos y GourmetAsí que, allá nos fuimos el último día.
Felices de poder disfrutarla, ya que generalmente tenemos que desplazarnos a ciudades mucho más grandes si queremos participar en alguna muestra de este tipo. Aplaudimos desde rumbovino a Fernando (Bordeaux Vinoteca) y José María (Buenas Ideas contenidos) por animarse a organizar este gran evento.
Un dato no menor a tener presente, y esto es para que las Bodegas comiencen a prestar más atención al sur de Santa Fe, es que el jueves asistieron más de 500 personas y el viernes más de 600!! ¿Qué les parece?

 A las ocho, como clavos, allí estábamos. Nos dieron una copita de cata y entramos. Para empezar queremos destacar la muy buena elección del lugar (Salón Victoria), una sala enorme, espaciosa y con un ambiente y una luz más que agradables. Puntazo y más aplausos!

El evento daba cabida a vinos y productos gourmet, pero también a algo que nos parece, marida increíblemente bien con todo esto, el ARTE. Al ingresar se podía ver una muestra de pintura con el artista trabajando en vivo y al fondo de la sala había un escenario en el que durante distintos momentos de la noche, tuvieron lugar algunas actuaciones musicales. El viernes cerró el evento el grupo CANTIGAL de Venado Tuerto. Aunque el sonido no fue de lo mejor, nos deleitamos con muy buena música para concluir la noche de maravillas.
También había algún stand de turismo y, para despuntar el “vicio” del juego, el Casino de Melincué puso una mesa de ruleta donde la gente se anotaba y jugaba por diversos regalos. Para todo los gustos, vaya!

Recién llegados! Hermoso salón. Amplio y bien iluminado!

Uno podía pasearse tranquilo por los stands, a pesar de la cantidad de gente (ya dijimos… más de 600 personas!!), dispuestos a ambos lados del salón y en el centro.
Algunos comentarios sobre lo que comimos y bebimos… Dijimos comimos?
En cuanto a los productos Gourmet, bravo por los expositores porque hubo comida abundante, pero ni la probamos! Aquí el tirón de orejas va para los visitantes… ya  que ni bien llegaban los fiambres, bocaditos, pata de cerdo asada o la cascada de chocolate, la gente se lanzaba como buitres, como si no hubiese mañana, y allí se anclaban sin pasar el relevo a los que desde atrás mirábamos ansiosos. ¡Benditas empanadas de Ana que nos papeamos antes de ir a la muestra!
Ojo, esto no lo comentamos nunca en las notas, pero es algo que hemos observado en cualquier evento en el que ofrezcan comida gratis aquí y al otro lado del océano, así que no es exclusividad argenta!
Por suerte, hubo un buen surtido de galletitas y panes permanentemente en algunas mesas… uf!
Sugerencia: Quizás, para próximas ediciones estaría bien que con la entrada diesen la posibilidad de una prueba “limitada” de productos, ya sea pincho, tapa, sándwich, etc. por persona, ya que uno no puede contar mucho con la cortesía de los visitantes.

Plena noche. Mucha gente y mucha comodidad!

Con el vino no hubo problema, había mucha gente pero aquí, con las degustaciones, los asistentes se vuelven más reflexivos, se acercaban con más calma. Bendito elixir!
El número de bodegas expositoras no fue muy grande y se echó en falta gente que supiese más del vino que ofrecía y esto, para los que nos interesa el tema, es algo fundamental.
Los caldos estaban más o menos a buena temperatura, y si bien probamos cosas interesantes, queremos destacar tres que nos llamaron la atención:
En blancos: ALTAS CUMBRES VIOGNIER 2012 (Bodegas Lagarde): una cepa que no se encuentra mucho por las góndolas y este ejemplar, de la gama más baja de Lagarde, está muy bien. Expresivo, mucha fruta blanca, flores y sobre todo fresco, a pesar de sus 14º de alcohol.
En tintos: FINCA NOTABLES MALBEC 2010 (Bodega El Esteco): se trata de un Single Vineyard cafayateño que vamos a definir como “vinazo” por donde se lo mire. Aplausos para esta bodega porque fue el mejor stand, para nuestro criterio, en lo que a vinos se refiere.

Sidra Los Amaya servida y contada por sus propios dueños

Pero, sin dudas, lo mejor de la noche fue la parada en la mesa de la Sidrería Los Amaya, no sólo porque nos encantó la sidra que elaboran (pura fruta en nariz, burbuja fina y persistente), sino porque estaban los propios creadores. Un matrimonio encantador que explicaba su hacer con todo detalle y pasión. Un producto presentado y servido en primera persona y con el mimo de tenerla a la temperatura adecuada, cosa que en otras mesas de vino no ocurría.
Como CRÍTICA a las bodegas: la falta de visión suficiente para observar que Venado Tuerto es una plaza muy interesante para ofrecer sus vinos de alta gama (todos, menos El Esteco, llevaron sus etiquetas más económicas). Parece que este privilegio lo dejan solo para las grandes citys como Buenos Aires, que parece ser el ombligo del mundo en tema vinos! 

Pero resulta que Venado, si bien no es una ciudad gigante, tiene una población más que interesada y posibilitada para invertir en vinos de alta gama, si estos tienen calidad y sobre todo si existe la posibilidad de probarlos. Tironcillo de orejas también  para ellos!

Pues eso, que lo pasamos fenomenal, y que aplaudimos de nuevo a los organizadores y expositores por ver y entender que un evento así hacía falta por estos lares.
Agradecemos inmensamente que nos hayan invitado y hasta el próximo año!
Gracias por leernos,Salute, Rumbovino.