La textura cremosa y brillante hace que me recuerde a un zapato de charol. Le añadí unas bolitas de caviar plateadas a modo de tachuelas, colocadas bien en línea con la ayuda de la pinza para decoración de uñas. Es una herramienta a la que cada día le encuentro más utilidad y ya la considero imprescindible para hacer nail art.
¿Os gustan las manicuras con negro? ¿Os recuerdan a un Loboutin?
Si te gusta Nailistas síguenos en las redes sociales y no te pierdas nuestras actualizaciones.