Uñas perfectas: como cuidarlas

Por Sante
El cuidado de las uñas es algo más que un proceso estético, y su principal objetivo es evitar su deterioro y mejorar su firmeza.Aunque no lo parezca, las uñas son un tipo de piel modificada y no cumplen funciones decorativas. Protegen las últimas falanges de los dedos, proporcionan apoyo para las puntas de los dedos de pies y manos y nos ayudan a llevar a cabo acciones como rascar una superficie o desatar un nudo. Su estado puede ser indicar de salud y requieren cuidados especiales para mantener su firmeza y evitar su deterioro.
La alimentación, la higiene y la manicura pueden mejorar su estado y disminuir el riesgo de infecciones.
Las uñas están formadas por tres capas de queratina. La primera es la parte brillante, la segunda capa se llama queratina mediana, y la tercera la queratina sensible. Estas tres capas corren el riesgo de separarse o doblarse con un uso intensivo del corta-uñas o de las tijeras.
•Una uña sana tiene una forma ovalada, es lisa y con un color parcialmente rosado. Dicho color se debe a la gran vascularización que existe en el lecho epidérmico y a las características transparentes de la uña.
•Consulte a su médico si nota cualquier anomalía: engrosamiento de la uña, cambio en el color o dolor que no cede.
•Durante la infancia las uñas son flexibles, transparentes, de superficie lisa y convexa. En los adultos, la uña es mas dura y resistente apreciándose siempre la presencia de lúnula (espacio blanquecino semilunar de la raíz de las uñas). En la senectud, la uña pierde brillo, se vuelve opaca, grisácea, frágil y la lúnula tiende a desaparecer.
•Las uñas de los dedos de la mano de un adulto crecen aproximadamente 0,1 milímetros al día. En la infancia, el crecimiento es de 0,15 milímetros al día, y en la tercera edad diminuye un poco, se que en 0,06 milímetros al día.
•Las uñas tienen entre un 7 y un 16% de agua, que es conveniente mantener para que su flexibilidad y dureza sean las adecuadas.
•Los grandes enemigos de las uñas son el agua, las manicuras agresivas, los productos detergentes, los malos cosméticos, quitaesmaltes mal formulados y abrasivos, sustancias alérgicas, golpes...
•Las manchas blancas en las uñas se deben a microtraumatismos, pequeños golpes directos sobre ellas que hacen que se separen las capas interiores, sin que la externa sufra deterioro.
Más vale prevenir
•No utilice quitaesmaltes agresivos o endurecedores cargados con demasiado formol, resecan las uñas y suelen ser la causa principal del daño de las capas de queratina, protectora natural de las uñas, dejándolas sin defensas frente a alteraciones y agresiones externas.
•El quitaesmalte ha de ser rico en sustancias oleosas y no contener acetona, ya que ataca la capa que protege las uñas, reseca la cutícula y amarillea los dedos.
•Limite el uso de esmaltes y quitaesmaltes.
•Aplíquese cremas hidratantes. Haga que penetren en las uñas mediante masajes.
•Si sus uñas presentan alguna patología, no les aplique ningún producto embellecedor. Empeorará el cuadro.
•Proteja sus uñas contra lejías y detergentes utilizando guantes dobles del plástico con revestimiento interior de algodón. Las labores domésticas son especialmente agresivas para las uñas.
•Elimine a diario la suciedad que se acumula debajo de las uñas.
•Séquese perfectamente las manos y las uñas tras lavárselas. El agua deteriora la lámina ungueal y la cutícula, resecándolas. Además, la humedad favorece el desarrollo de infecciones.
•Preserve sus uñas del sol y de las agresiones externas como el frío extremo, la lluvia y el calor.
•Si una uña tiene una infección o un hongo nunca emplee la misma lima que ha utilizado con las uñas sanas para evitar la transmisión de la infección.
•Atención fumadores. El tabaco es pernicioso para la salud de sus uñas. Además de retrasar el crecimiento, por un déficit de nutrición al contraer los vasos sanguíneos, también provoca alteraciones antiestéticas, como por ejemplo el color amarillento de las mismas.
La manicura perfecta
•No se haga la manicura más de una vez a la semana.
•La longitud de la uña no debe pasar el pulpejo (parte carnosa), ya que al aumentar su superficie libre se favorece la pérdida de agua.
•No tire de los molestos padrastros.
•No elimine las cutículas. Son la protección natural para que no se dañe la 'fábrica' de la uña. El recortado exagerado de la cutícula aumenta la posibilidad de contraer infecciones.
•Para eliminar el esmalte, oprima la uña durante unos segundos con un trozo de algodón impregnado en quitaesmalte sin acetona.
•Para darles forma use una lima de cartón -las metálicas pueden astillar las uñas- haciéndolo desde los lados hacia el centro, con movimientos suaves y continuos. Evite el uso de tijeras.
•No las pula con métodos muy agresivos ni abrasivos. De brillo a sus uñas con telas de gamuza acolchadas o similares.
•Si acostumbra a aplicarse esmalte, antes de hacerlo no se olvide de la base protectora. Extienda el esmalte en capas muy finas y espere unos momentos antes de aplicar otra capa.
Nutrirlas desde dentro
Los componentes esenciales de la uña son queratina, agua y lípidos, calcio y hierro.
•Los alimentos más apropiados para mantener las uñas fuertes son los mismos que también dan fortaleza y belleza a los cabellos, es decir, los que tienen un alto contenido de proteínas, sales minerales y vitaminas.
•Las sales minerales más efectivas son las del calcio, yodo, cinc, y hierro. Por lo que es recomendable consumir leche, yogures, quesos frescos, hígado de ternera, espinacas, lentejas, sésamo y algas.
•Las vitaminas más beneficiosas para las uñas son la vitamina A, que se encuentra con abundancia en el tomate, el pimiento rojo y la zanahoria, y las vitaminas del grupo B, contenidas entre otros alimentos, en la levadura de cerveza.
Las uñas de los pies, grandes olvidadas
•Preste especial atención a las uñas de los pies. Las uñas demasiado largas, demasiado cortas o mal cortadas pueden dar problemas y ser causa de infecciones.
•Córtese las uñas después del lavado de los pies, estarán más blandas y serán más fáciles de cortar.
•Use una tijera de punta roma. No utilice tijeras con punta, alicates de manicura, hojas de afeitar, limas metálicas, etc.
•Córtelas horizontalmente, dejando los bordes rectos.
•No las deje demasiado cortas. Deje que sobresalga la lámina ungueal (parte visible de la uña) al menos un milímetro por delante del pulpejo (parte carnosa) del dedo
•Lime las puntas con una lima de cartón. No utilice tijeras con punta, alicates de manicura, hojas de afeitar, limas metálicas, etc.