Considero que lo primero es mirarnos hacia dentro, valorarnos y ver si nosotros no hemos sido y somos parte de lo que se ha estado mal haciendo y asumir en lo personal esa responsabilidad. Debo también apuntar que mi mayor temor es que al haber tenido esos compañeros un espacio tan importante como fue el Congreso y ser portadores de la palabra que se supone sea la de la vanguardia cultural del país se tomen sus criterios de forma absoluta, criterios que en el fondo están sustentados por su visión particular y en algunos casos su muy cuestionable forma de hacer se imponga trayendo por consecuencia que erigidos en modelo se establezca uniformemente una rígida fórmula en detrimento de la creación . Al respecto me viene a la mente otra sentencia de Confucio: “Hay hombres que tienen fama de grandes creadores porque nunca nadie les ha refutado sus endebles argumentos. Uno de los principales defectos de los hombres consiste en pretender erigirse en modelo de los demás.”
El segundo aspecto que quiero abordar es sobre un planteamiento en actriz Corina Mestre y que considero muy acertado. Planteó que “debemos retomar la factura de los dramatizados de obras clásicas: esas aventuras, novelas y cuentos que acompañaron la educación de nuestro pueblo durante muchas décadas, y que a partir de los 90 han sido reemplazados mayoritariamente por la realización de obras originales, algunas de dudosa calidad.”. No es menos cierto lo que plantea sobre prácticamente la eliminación de obras de la literatura universal en nuestros medios; un hecho que nos toca muy de cerca a los villaclareños cuando fue eliminado el espacio “ La Novela Universal” de la emisora provincial y que se transmitía a las 3 pm de lunes a viernes, pero… otro temor que me embarga es que se arme una cruzada contra las obras originales que en definitiva son las que reflejan nuestra rica realidad y nuestra historia y que dan la posibilidad de que los escritores que tributamos al medio radial hagan su obra . Desde luego, como bien apuntaba Corina Mestre, muchas de las obras originales que se han transmitido y se transmiten son de dudosa calidad aunque agrego; también de dudosa calidad han sido muchas de las versiones y adaptaciones de obras de la Literatura Universal. ¿Entonces donde está la esencia del problema?. Considero que en quienes escriben que en ocasiones los asesores, directores, elenco y realizadores en general tienen que sufrirlo.
En la resolución # 23 sobre la protección a los autores de argumentos y guiones que se producen para la radio y la televisión, así como a los de las obras audiovisuales creadas para la televisión, está estipulado en el CAPITULO IV ARTÍCULO # 22: Las tarifas contenidas en el Anexo No. 2 constituyen límites mínimos de pago. El productor puede pactar con el autor una remuneración hasta el veinticinco por ciento (25%) de incremento sobre la tarifa mínima fijada. Y en la nueva resolución # 51 capítulo # 5 Sección Primera la cual sustituye a la 23 se consigna lo siguiente:
ARTÍCULO 15.- Sin perjuicio de lo establecido en el presente Reglamento, la remuneración a los autores se hace conforme a las tarifas establecidas en el Anexo Único que se aprueba por la presente Resolución, formando parte integrante de esta, las que constituyen los límites mínimos susceptibles de ser incrementados hasta el ciento por ciento (100 %) por el productor en acuerdo con el autor, atendiendo a:
a) La calidad del trabajo presentado por el autor;
b) la necesidad de estimular géneros y espacios en función de la programación;
c) la importancia y valores estéticos, sociales, históricos o científicos de la obra;
d) la complejidad del trabajo desarrollado por el autor;
e) la experiencia y calificación del autor y el reconocimiento alcanzado por su obra; y a que la obra sea encargada por el productor.
¿Qué ha estado sucediendo al respecto?. Escritores que son íconos en la dramaturgia Radial reciben el mismo pago que aquellos que recién comienzan o que simplemente como apuntara Corina Mestre: “de dudosa calidad”. Ese igualitarismo corrosivo ha generado vientos que se han hecho tormenta porque lógicamente muchos íconos han dejado de escribir o han disminuido su producción o simplemente se sienten amargados y la mediocridad ha tomado esos espacios.Video en YouTube https://www.youtube.com/watch?v=viG4BiI71og
(*) Escritor, director, actor y profesor de dramaturgia de la escuela Profesional de Arte Samuel Feijoo de Villa Clara