Os hablo específicamente de éstas porque, aunque he usado otras marcas, éstas son las que encuentro más eficaces y, muy importante, más económicas.
Os cuento más...
¿Qué es el colágeno?
El colágeno es una proteína presente en nuestro organismo que, aplicada de forma tópica, aporta hidratación, tersura y firmeza.
Aunque, en principio, el colágeno tiene moléculas grandes a las que le cuesta penetrar en la piel, al aplicarle distintas técnicas (p. ej.: hidrolizado) que rompen esas moléculas en trozos más pequeños consiguiendo que puedan traspasarla y ser más efectivas. En cualquier caso, aunque no pudiesen rebasar la capa más externa de la piel (algo que no sucede en este caso), servirían para crear una capa externa e invisible que mantendría la hidratación de la piel y ayudarían a crear un efecto tensor (flash)... aunque sólo durase unas horas.
Oiréis que el colágeno sólo es efectivo ingerido, aunque con estas técnicas que facilitan la penetración en la piel, es también eficaz de forma tópica. La combinación perfecta sería: una alimentación que favorezca la formación de colágeno + suplemento oral de esta proteína + tratamientos de cabina que aumenten la producción de colágeno en nuestra piel (p. ej.: foto rejuvenecimiento) + tratamientos tópicos que los contengan puro en una alta proporción.
¿Para qué se usa?
Este tratamiento sirve para atenuar las arrugas, regenerar, nutrir, revitalizar, aportar luminosidad y proteger del sol de manera natural (ojo, esto no quiere decir que se os olvide el protector solar). También tiene un efecto antioxidante, gracias a la vitamina C.
¿Qué composición tienen las ampollas?
En su composición encontramos, además de colágeno, otras joyas de la cosmética: vitaminas C y F, elastina, centella asiática y camomila.
¿Para qué se emplean?
También las podéis utilizar como extra en vuestra rutina de belleza. El fabricante recomienda el producto para un efecto antiarrugas, con una aplicación diaria durante 15 días y un mantenimiento de 2-3 veces por semana. Yo las uso como un habitual dentro de mis tratamientos faciales: por la mañana las uso antes o en lugar del sérum, las utilizo cuando me aplico mascarilla (pongo una buena capa antes de ponérmela para que penetre bien junto con los principios activos de las mascarilla) y como tratamiento extra para las arruguitas del escote.
Un truquito manicuril: poneos un par de gotas antes de la crema de vez en cuando y veréis que suaves y rejuvenecidas quedan vuestras manos. Ideal cuando tengáis un compromiso y os vayáis a poner vuestro mejor anillo.
¿Cómo aplicarlas?
Como es de suponer, se aplican con las piel limpia y seca, vamos ninguna novedad. Poned una pequeña cantidad en las palmas de las manos y extendedla por todo el rostro con suavidad. Masajead con mimo por toda la cara para no desplazar tejidos e insistid en las zonas más problemáticas (cuello, parte superior del labio, comisuras, patas de gallo, entrecejo, frente...); eso sí, evitad el contorno de los ojos, el producto es potente y se trata de una zona muy delicada. Luego haced presiones ligeras con las palmas de las manos por el rostro, para que penetren mejor sus componentes).
Plus
Estas ampollas son mucho más económicas que las más conocidas del mercado, aunque cuentan con más principio activo. El precio recomendado son 3,50 € la caja de 2 ud. y 17,30 € la de 11 ud., vamos un chollo. Personalmente, me parece más interesante la opción de las 11 unidades, porque seguro que tendréis ocasión de usarlas.
No hace falta utilizar toda la ampolla de una vez. El fabricante habla de que, en cada una, hay hasta 3 dosis; mi experiencia, es que se puede estirar incluso más. Eso sí, debéis usarla en los 5 días siguientes a haberla abierto (a temperatura ambiente, si está en frigo podría durar algo más, aunque yo no me arriesgaría). En cualquier caso, os daréis cuenta de que cambia de color (ámbar en condiciones óptimas) con el paso de los días y el líquido se vuelve parduzco, cuando llegue ese punto, desechadla.
Otra ventaja que tienen estas ampollas es que llevan un accesorio para romper la ampolla (es de vidrio) que evita que os dañéis las manos. Yo llevo usando este producto mucho tiempo y antes no lo incluía en la caja y me he cortado en varias ocasiones, ahora con esta ayudita, es mucho más cómodo.
Si os gustan las ampollas de colágeno pero no usáis esta marca, os doy un consejo que me dio mi súper-esteticista Patricia: para conservar mejor las ampollas una vez abiertas, utilizar una jeringa (sin aguja, of course), así evitaréis que el producto tenga un contacto excesivo con el oxígeno y los gérmenes; ponedla en un vasito boca arriba, así no se saldrá el contenido.
Y una advertencia: a veces pueden enrojecer ligeramente la piel, aunque se pasa enseguida. No producen alergia ni dan reacción, pero a veces tienen un efecto algo irritante, un pequeño precio que hay que pagar por un resultado increíble.