Estamos en 1920, en Marqués de Paradas esquina con la calle Pedro del Toro, y vemos a los Mozos de maletas de la estación de trenes Plaza de Armas...
Imaginamos que estarán haciendo tiempo al sol mientras llega el siguiente tren procedente de Córdoba. Otros compañeros aprovechan para tomarse un chato de vino en la taberna que tienen justo al lado...
Trabajadores del tren, que enlazaban turnos de sol a sol, de lunes a domingo sin un reconocimiento publico...
Parece que todo tiene una fecha de caducidad en la vida, hasta los oficios, y es que incluso miramos con cierta nostalgia ciertos personajes que antes eran parte de nuestro entorno cotidiano...
Fernando Romero Hato
Universidad de Sevilla