Pero, en realidad, Up in the Air trata de la persona encargada de llevar este terrible cometido de soltar en el limbo profesional a esforzados trabajadores que lo han dado todo por una empresa que, al contrario que ellos, no tiene corazón, ni familia. Este personaje, interpretado por un gran George Clooney, se enfrentará a la filosofía de vida que ha ido elaborando durante años de trabajo y viajes por todo el país. Aquí está la belleza de la película y donde radica su grandeza, el héroe enfrentándose a sí mismo, mucho peor que enfrentarse al paro, a la empresa o a un villano con superpoderes. Mírate en el espejo y dime qué ves.
El resto de actores arropan a Clooney dando una lección de profesionalidad a la altura de un guión sin una sola fisura y nada complaciente, repleto de verdades tan verdaderas como un puñetazo en todo el cigarrillo y que, joder, te hacen reír. ¿Dónde se ha visto que te den un guantazo y te rías?
Todos acaban donde tienen que acabar... como si fuera la vida real, y no una película. Justa o injusta, la vida es así y hay que tomarla como viene.
FRANK