La serie se ambienta en la década de los 80 en el pueblo ficticio de Hawkins, en Indiana. En un entorno de aparente tranquilidad, irán surgiendo sucesos y misterios en un laboratorio gubernamental secreto hasta el descubrimiento de un portal hacia el Upside-Down o Mundo del Revés. Extrañas criaturas cruzarán el portal y obligarán a actuar a un singular grupo de amigos que cambiarán el rumbo de la historia.No he sido nunca aficionada a las historias de terror, me incomodan y me crean una sensación de ansia terrible. Cuando empezó la primera temporada, fui consciente del éxito pero no me atrevía a verla. Iba preguntado a amigos y conocidos qué les parecía y si daba realmente miedo. No me gusta "sufrir" mientras veo un film o una serie tipo "It" y era una incógnita que quería desvelar. Cuando me comentaron que no era ese tipo de tensión, me animé a verla. He de decir que el grupo de niños me conquistó desde el primer momento. La puesta en escena, el vestuario, los diálogos...quedé prendada de ese ambiente de los 80, bien conseguido en la serie a través de los hermanos Duffer. La historia te va introduciendo poco a poco a través de la desaparición de Will Byers en ese mundo extraño, alternativo y complementario al nuestro que es el Upside-Down. Esas criaturas inimaginables que son los demogorgons, la ambientación y los recursos que propone la serie son increíbles. Te capta desde el primer momento porque nunca has visto nada igual. Ahora lo familiarizamos una vez que estamos dentro de la trama y conocemos a los personajes. El grupo de amigos nos recuerda al que teníamos de niños. No había móviles ni videojuegos en casa. Había vinilos, cintas de casette y walkmans. Bicis y patines. Los famosos Walkie-Talkie con los que jugábamos aquí se convierten en una forma de comunicación a través del "Do you copy?"
Para esta ocasión, quería inspirarme en una receta la conocida marca americana Chips Ahoy! ha creado para la última temporada. Las Upside-Down Cookies reflejan el portal de color oscuro con el rojo viscoso interior. En mi caso he horneado unas galletas de chocolate negro con relleno de puré de fresas que recuerdan a esa abertura hacia el otro mundo. La combinación es muy rica y crea un efecto sorpresa cuando vemos el rojo interior. ¡Pasamos a la receta!
-200 grs. harina repostería
- 60 grs. cacao en polvo
- 1/2 cdta. baking soda
- 1/2 cdta. sal
- 90 grs. mantequilla
- 80 grs. azúcar moreno
- 40 grs. azúcar blanco
- 1 huevo
- 1 yema
- 2 cdtas. vainilla
- 100 grs. pepitas chocolate
Puré fresas:
- 300 grs. fresas
- 1 cda. maicena
Tamizamos harina, baking soda, el cacao y la sal. Añadimos en varios pasos a la masa de mantequilla. Mezclamos con espátula y dejamos reposar 1 hora en nevera.
Haremos bolitas que extendemos y en el centro colocamos el puré. Cerramos y aplastamos un poco sobre la bandeja de horno. Añadimos pepitas chocolate de decoración.
Horneamos a 180 grados 12-14 minutos. Dejamos enfriar unos minutos antes de pasarlas a la rejilla para que enfríen completamente. Conservamos en recipiente hermético.
¿Y tú, también estás esperando a que llegue el jueves para ver la serie? Estas cookies os servirán para preparar algo antes de sentaros en el sofá y disfrutar de la serie. Igualmente, son cookies rellenas que podéis regalar o hacer para otra ocasión especial.
Si os gustan las cookies, podéis probar otras recetas como las cookies a los tres chocolates, doble chocolate o de chocolate blanco y pistachos.
Vuelvo pronto con otra de receta de Hawkins.
Un abrazo,
Maribel García 🍓