Cubierta de sonidos
muere.
Pueblan los espacios
tras las horas calmas
de la madrugada.
Tristezas de otros tiempos
barren las asoladas
esquinas del recuerdo.
Murmullos con músicas
detrás de las ventanas
aguardan impávidos
la prisa.
Los minutos,
encierran lo sutil ,
arrastran la locura
de un mundo envejecido.