El Peso mexicano sigue avanzando posiciones frente al Dólar y a corto plazo da seńales de fuerza tras haber superado el importante soporte de los 12,1299. De este modo, retoma la senda bajista principal de medio plazo que se inició tras marcar un máximo multianual en los 15,5844 en marzo de 2009. Como seńalábamos en un anterior análisis una vez que la variable riesgo pasase a un segundo plano los fundamentales deberían mandar.
El cruce además de superar el soporte aludido ha perforado a la baja la media de las últimas 200 sesiones, nivel técnico que suele ser muy seguido. El cruce también ha superado el nivel clave de los 12,0450 que es por dónde pasaba el 61,8% del retroceso de Fibonacci del impulso desde los mínimos de agosto de 2008 en los 9,8571 hasta los máximos de los 15,5844. Su perforación, le debería llevar hasta el origen del movimiento.
Al observar los osciladores, vemos que el estocástico ha tocado la banda de sobreventa pero todavía le quedaría potencial bajista al precio como nos confirma el RSI.
Del mismo modo, el amplio diferencial de intereses, un 4,50% del Banco de México frente al rango del 0-0,25% de la Reserva Federal favorece claramente al Peso en las clásicas operaciones de ‘carry trade’ que buscan rentabilizar los diferenciales de tipos.
Desde el punto de vista fundamental, la economía mejicana está saliendo paulatinamente de la crisis, los estímulos fiscales y monetarios junto a la depreciación del Peso han ayudado a ello. Tras una contracción del PIB del 6,5% en 2009 el FMI estima que la producción podría aumentar a una tasa de 5% en 2010 y cercana a un 4% en 2011. Mientras las mismas estimaciones del FMI seńalan que el PIB en los EE.UU. crecerá un 2,6% en 2010 y un 2,3% en 2011.
Desde un punto de vista macroeconómico los problemas más acuciantes a los que debe hacer el Gobierno de Calderón son la persistencia de la inflación que sigue alejada del objetivo del 3%, el desempleo y la consolidación fiscal.
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