V Maratón Cabberty Ciudad de Málaga 2014, Domingo 7 de Diciembre - Premilinares

Por Juan Andrés Camacho Fernández @CorredorErrante

(Estoy a la espera de obtener fotos de la V maratón de Málaga, en cuanto obtenga imágenes de la maratón las añadiré a la crónica).


Domingo 8 de Diciembre, 7 y media de la mañana; un joven y su novia desayunan pizza en un coche tras celebrar el cumpleaños del primero hasta hace escasas horas.


Uno normalmente diría que, en ese caso, es posible que hayan dormido muy poco esa noche, y teniendo en cuenta que salieron desde Las Lagunas cerca de las 6 de la mañana, muy pero que muy poco.

Si nos aventuramos un poco, lo normal es que la pareja se dirija a un after o similar, pero no, esta no es una pareja normal, como certifica la foto:



En efecto, ¡me habéis pillado! pero ya os lo adelantaba el sábado, tras mucho meditarlo y tras dos meses prácticamente en el dique seco, este año volvería a la maratón que me vio debutar el año pasado.


Que diferente pintaba el panorama, el año pasado preparado físicamente hasta el último músculo y la última sesión, psicológicamente solo rascando la puntita del iceberg de lo que me esperaba, pero igualmente preparado, buscando bajar de la barrera de las 3 horas en mi debut en la distancia.


Este año, psicológicamente preparado, hasta el último detalle, concienciado de lo mucho que sufriría, de las altísimas probabilidades de que algo saliese mal y muy concienciado de que, al menor problema relacionado con mis recientes lesiones, abandonaría.


El objetivo, a priori, ni si quiera era el finisher, sino acompañar a José Antonio, entre otros debutantes en maratón del Club Atletismo Fuengirola, hasta donde el cuerpo me lo permitiese.


Llevaba inscrito meses, me hacía muchísima ilusión correr en la prueba, y al menos, le debía a José Antonio, que tiró de mi en la pasada edición desde el kilómetro 22, el intento.


También es de agradecer el ánimo recibido por Twitter, así que me dije "bueno, que no se diga que al menos no lo intenté", y tras cerca de 4 horitas de sueño y comprometerme con Mayte, mi pareja, estábamos los dos a 8 graditos desayunando en una de las callejuelas más próximas a la salida del maratón que encontramos.


Una vez acabé mi desayuno, y tras contactar con Emilio, de Medrunning (si, incumplí su consejo número 3, pero no hagáis vosotros lo mismo y descansad bien antes de un maratón), salí del coche acompañado por mi chica, y tras una breve parada en los servicios del parking de Plaza de la Marina, que no os detallaré para no revolveros el estómago (parecía que habían pasado 10.000 personas por ellos, como poco), nos dirigimos a la zona de salida.


Al principio solo había 3 muchachos por la zona, dos del Cuevas de Nerja y Emilio, del Málaga Blanquiazul, además de algún intrépido (o insensato, la línea es muy delgada) que ya antes de amanecer trotaba de un lado a otro ¡en manga corta y calzonas!; eso si que es valor, seguro que eran extranjeros...


Poco a poco fue llegando más gente, y al otro lado de los cajones de salida vislumbré a Carlos Matoso y José Luis Castañeda, compañeros del club que afrontarían esta maratón por primera y decimoquinta vez, respectivamente.


Justo cuando buscaba un hueco para cruzar me encontré con José Antonio y Cuesta, compañeros del club que también debutarían en la misma y a quienes pensaba acompañar hasta donde pudiese.


Como podéis observar a la derecha de la imagen, y para los que hayáis leído mi crónica de los 101 kilómetros de Ronda, os sonará ese toro gigante... 


En efecto, ¡es el que se encontraba en mitad del campo de fútbol!


Su presencia me animó bastante, fue una especie de buen augurio inesperado.


Mientras más compañeros del club fueron llegando, yo acompañé a José Antonio y Cuesta al guardarropa, donde me encontré con Raúl, de Trekking&Running Marbella, fuerte tras su hora 25 en la media maratón de Marbella de este año y una buena preparación para la maratón, que hoy venía a por todas.


Tras charlar brevemente con él y desearnos suerte mutuamente, comencé a quitarme capas; este año no cometería el error del año anterior, y pese a los 8 graditos y la brisa que soplaba, correría en camiseta de aros y calzonas.


Volviendo del guardarropa me encontré con Cristóbal, viejo conocido de las carreras, especialmente por montaña, y ya en los aldeaños del "toro cientounero", con Míchel, debutante de oro en la maratón (todo un ejemplo de constancia, esfuerzo y sacrificio, sin quitarle mérito a nadie) y Felipe, su liebre en la que sería, posiblemente, la mañana más larga de su vida.


Faltaba ya poco más de media hora para el comienzo de la carrera, así que entré en los cajones de salida por un lateral (me sorprendió el escaso control de  esta edición, aunque teniendo en cuenta que cuando me inscribí pensaba ir a por el sub 3 horas y estaba entrando en el cajón de las 4...), y tras avanzar un poco, me encontré con el resto de mis compañeros del club.


Nos pusimos brevemente al día, y mientras me mentalizaba una vez más de lo que me esperaba, vi pasar a María, autora de Más kilómetros, Corredora Popular, a la que por fin conocí en persona (habíamos coincidido en otros maratones, pero nunca nos habíamos visto), y poco después, a Emilio, de Medrunning, con quien había estado en contacto los días previos a la maratón.


Estuve charlando con él y mis compañeros de club mientras los minutos pasaban, pero como hoy no llevaba reloj, sino mi reciente regalo de cumpleaños, el Garmin Forerunner 310 XT, no sabía si faltaba mucho para la salida o no.


Alguien comentó que quedaban menos de 5 minutos para el inicio, así que encendí el GPS (se toma su tiempo para buscar satélites), comprobé que llevaba bien ajustadas las Fivefingers y me preparé para comenzar el que sería mi cuarto maratón, mi segundo maratón de Málaga y mi segundo maratón con calzado minimalista; que lo acabase o no ya sería otra historia, que precisamente estaba a punto de comenzar...


PD: ¡gracias a @phpeluqueros por cederme esta imagen de la salida!

Leer V Maratón Cabberty Ciudad de Málaga 2014, Domingo 7 de Diciembre - Como en los viejos tiempos.