Disfrutar del placer de la lectura. Hete aquí uno de los objetivos principales que todo lector tiene cuando afronta la lectura de una obra literaria - del género literario que sea- y más cuando se trata, como es el caso de esta entrada, de un reto, de una lectura conjunta. Porque el poder disfrutar, el poder quedar atrapado por el libro- o libros- en cuestión, por la trama, por el conjunto de sus personajes - o por uno determinado- que suscite cierto interés a la persona que acaba inmersa en el proceso de leer aquella obra, son los objetivos relevantes de toda lectura conjunta. ¿Qué se puede decir de Almudena Grandes que no se sepa? Habitual desde hace años en los medios de comunicación- merced sobre todo al conjunto de novelas publicadas- esta escritora madrileña es conocida no solo por esta serie de novelas sino también por Confieso que, aunque sé de la trayectoria literaria de El período de la Guerra civil española y los años de postguerra han sido cuestiones abordadas como tema literario por algunos autores (Juan Eslava Galán con Debo confesar que en algunos pasajes, sobre todo las primeras páginas, uno puede decidir el abandono de la lectura, algo densos que debes leer más de una vez para una mejor compresión, pero hay algo en cómo narra Ha sido esta una novela que me ha agradado descubrir, con lo que el objetivo primordial de disfrutar de la lectura se ha conseguido. Así pues, sigo adelante con el reto de la serie de Episodios interminables... Ya contaré qué me ha parecido la segunda novela de esta serie (
Y con esta propuesta de lectura conjunta de la serie de novelas que forman parte de Los episodios interminables (hasta ahora se han publicado tres de las siete novelas que la escritora ha planteado para esta serie) de la autora Almudena Grandes, de la que esta entrada comenta el primero de los libros (es por tanto la primera parte del reto lector, pues al aventurarme para esta incursión literaria decidí hacerlo con las tres novelas publicadas hasta ahora), así ha sido.
Los aires difíciles, Las edades de Lulú (su primera novela publicada y con la que obtuvo el Premio Sonrisa Vertical de novela erótica), Almudena Grandes, casi nada he leído de lo escrito y publicado por ella (leí tiempo ha Las edades de Lulú). Por tanto, he llegado a este reto lector, a esta lectura conjunta con un triple objetivo: descubrir a una autora referente de las letras, disfrutar del placer de la lectura y descubrir un nuevo mundo literario como es el expuesto en esta serie de novelas con la guerra civil y la postguerra española como telón de fondo. La mula, Álvaro Valcarce Alba, con Lucha de sangre, Júlia Navarro con Dime quién soy, entre otros ejemplos) de distinta manera y aportando visiones o matices diferentes. Malena tiene nombre de tango, etc. "Puse el caballo al trote y subí por la ladera del cerro sin apresurarme. Al otro lado, na voz me detuvo antes de que terminara de bajar la pendiente.
-¡Alto!- y nunca en mi vida una sola palabra me había hecho tan feliz- ¿Quién vive?
En este primer episodio de la serie, con Inés y la alegría, Almudena Grandes nos ofrece un retrato amplio de los años finales de la contienda bélica y de los años posteriores, de cómo desde la clandestinidad, en suelo francés sobre todo, se organizaban grupos de personas para defender sus ideas, para llevarlas a cabo. Asimismo, nos ofrece esta autora un episodio que en los libros de historia, en muchas novelas con temática similar ha pasado casi desapercibido como es el de la invasión del valle de Arán y las escaramuzas existentes entre las distintas facciones.- La República- grité, y tiré de las riendas suavemente.
-¿Qué?
Cuando escuché esa pregunta, temí haberme equivocado, pero los soldados que salieron de detrás de una peña vestían un uniforme desconocido para mí excepto por los colores del parche, rojo, amarillo y morado, que llevaban cosido encima del pecho.
-Pero ¿esto qué es?- el que parecía estar al mando no había perdido en Francia ni una pizca de su acento andaluz-. ¿Una broma?
Me acerqué a ellos muy despacio, con las manos en alto, las riendas enganchadas en el pulgar, en los labios una sonrisa que terminé de desconcertares."
(página 217) [...]
Es a partir de este fragmento cuando, a mi modo de ver, la novela gana en intensidad, pues Inés, la protagonista femenina de la trama, después de escaparse de donde la tenían retenida, entre otros su hermano, un delegado provincial de Falange, encuentra a una serie de milicianos con los que decide colaborar y unirse (aunque en un momento determinado sufre las consecuencias de las dudas que tienen sobre ella tras una serie de acontecimientos). Y lo hace como ella mejor sabe: desde la cocina, algo que en el futuro le reportará beneficios.
Con Galán, con quien establece una relación sentimental que perdurará en el tiempo y con el que tendrá varios hijos, Comprendes, Monzón, entre otros, inicia un camino que le llevará a sufrir las andanzas, las dudas, las inquietudes de una situación mejor, la clandestinidad de sus acciones para defender, plantear unas ideas democráticas.
Almudena Grandes que te invita a quedarte, a continuar con el proceso de leer y seguir descubriendo detalles, personajes (en la segunda mitad de la novela aparecen personajes reales de la historia española como Carrillo o La Pasionaria), que ofrecen un apunte histórico a tener en cuenta para entender aquellos años de postguerra, aquel período en el que desde la clandestinidad, en territorio francés principalmente, se dieron toda una serie de pasos, de acciones.
El lector de Julio Verne). El reto continúa...