Vacaciones

Publicado el 02 abril 2015 por Alfonso65 @AlfonRoldan

Las vacaciones no surgieron por arte de magia. (Plentzia)

La necesidad humana de descansar de la rutina se explica en la existencia misma del vocablo “vacación”. Deriva del latín vacatio o vacationis, y se refiere al descanso temporal de una actividad habitual, principalmente del trabajo remunerado o de los estudios, según cita el Diccionario de la Lengua Española.


Fue el 11 de julio de 1936, cuando el socialista francés Léon Blum instituyó en Francia la semana laboral de 40 horas. El escenario político y social de ese país, ante la acometida nazi, era entonces muy complejo; la política social de Blum despertó el optimismo de los trabajadores.

Los empresarios, que temían el estallido de una revolución, negociaron con el gobierno, y el 20 de julio de ese mismo año, el parlamento otorgó a los trabajadores 15 días de vacaciones pagadas.
A ello se sumó un descuento en el “boleto de vacaciones anuales” para el ferrocarril, transporte que movilizó a los primeros 600 mil trabajadores turistas de la historia. Un año después, en 1937, la cifra se triplicó.
En España fueron las Cortes Constituyentes de la Segunda República las que aprobaron una Ley de Contrato de trabajo, con derecho a siete días de vacaciones.
El 10 de diciembre de 1948, en el artículo 24 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, el derecho a las vacaciones fue consagrado:
Toda persona tiene derecho al descanso, al disfrute del tiempo libre, a una limitación razonable de la duración del trabajo y a vacaciones periódicas pagadas”.
Vamos, que esto de las vacaciones no es algo que surgió por arte de magia. Fue un derecho peleado y conquistado gracias a los trabajafores organizados. Sí. Gracias a los sindicatos de clase.