Para mí hoy empiezan las vacaciones de verano! Siempre se ha pensado que las vacaciones son para desconectarse de la rutina, el quehacer diario y el entorno cotidiano! Quizás por ello la gente opta por tomar sus vacaciones con filosofía aventurera y abandonar su lugar de residencia para dirigirse hacia el mar o la montaña, o bien viajar para visitar algún país lejano y conocer otras culturas, tradiciones, gentes o paisajes!
La verdad es que no sé aún qué voy a hacer este verano, me gusta improvisar! Mejor dicho, sí sé bien que haría, si pudiera! En otras circunstancias, llenaría el depósito de gasolina de mi vieja motocicleta alemana, me haría una ligera bolsa con equipaje y tomaría la primera carretera que se pusiera enfrente para dirigirme hacia el mar del Norte, allí donde nace el arcoiris y donde está mi corazón! Guiado por un mapa y mi corazón inquieto, iría día a día cruzando paises, ciudades, pueblos y paisajes de media Europa, descansando cuando lo necesitara y haciendo -como siempre- miles de fotografías de lo que vieran interesante mis retinas…
Y, con miles de kilómetros tras mis espaldas, llegaría por fin a ese lugar que hoy solo existe en mis sueños, diarios. Y me daría cuenta de que, a pesar de mi ilusión por llegar, no sabría dónde buscar mi corazón en una tierra extraña, donde desconozco la población, sus calles, sus establecimientos hoteleros, sus restaurantes o, llana y simplemente, donde se aloja mi corazón, que lleva tiempo escondido en alguna parte de esa preciosa ciudad bañada por el mar del Norte, allí donde solo sé que nace el arcoiris y habita mi amor… y que mi Alma los contiene desde siempre a los dos!
Y es que, aunque ahora mis sueños tienen nombre y apellidos, color y matices, rincones compartidos en la distancia, bosques, playas y lagos plateados, no sería capaz de encontrar todo eso en un mismo mapa! Y tal vez debería confiar una vez más en mi corazón y en su intuición inequívoca! Y, una vez más, éste me guiaría hasta llevarme a ese benerado lugar donde ahora reposa mi Alma y donde una sola mirada me permitiría reecontrarme en la realidad con mi amor! Y, a mi llegada, la miraría en silencio, la abrazaría con ternura y disfrutaría viendo mi imagen reflejada en su bellos ojos, donde al parecer siempre estuve, sin saberlo siquiera ninguno de los dos!
Y en sus ojos vería esa ilusión tejida con infinidad de horas pasadas en silencio, esas decenas de lunas llenas y nuevas que hasta ahora han iluminado nuestras veladas compartidas, en soledad… y todos los kilómetros recorridos hasta llegar a donde entonces estaría yo! Y mi corazón palpitaría como el primer día en que ella apareció en mi vida, cuando supe con certeza que sería mi primer y posiblemente único amor! Y sonreiría y le tomaría suavemente sus manos para acariciar con ellas mi rostro agotado por el largo viaje hasta mi sueño dorado! Y corroboraría que sus cabellos color de trigo son para mí ese campo infinito en el que mis dedos se pierden, mientras dibujan el contorno de su bello rostro. Y mi mirada se vería en la suya, en unos ojos bellos y cristalinos que reflejarían mi profunda alegría y mi más sincero amor! Y bajaría mi mirada para ver entre sus acojedores brazos a mis niñas amadas y adoradas…
Y me daría cuenta de que, tal vez, no hay viaje inútil y sin sentido ya en mi vida! Que tantos momentos antes y aparentemente yermos tienen su sentido en nuestra vida, siempre! Y entonces descansaría mi cabeza en su hombro desnudo y cerraría mis ojos para descansar, reencontrándome con esa Alma amada que, aún en la distancia, llevo cada día dentro de la mía! E, incapaz de describir el momento y cómo hubiera llegado hasta él, me sentiría feliz, al sentirla también feliz a ella! Y vería recompensada mi historía pasada llena de luces y de sombras, mis circunstancias pasajeras… y hallaría en cada una de ellas una lección necesaria para vivir el ahora y el sentido a mi largo viaje en busca de mi corazón, allí donde nace el arcoiris y ya está hoy!
Esas serían mis vacaciones si pudiera elegir, si la vida quisiera regalarme ahora ese momento de felicidad eterna, aunque la viviera como un sueño intenso, efímero y viajero! Y, en vez de desconectarme de mi vida, me hubiera reconectado a ella y hallado por fin el sentido pleno al camino que me ha traído hasta aquí , donde mi paz y mi amor reinarían, aunque fuera por solo un día junto a ella! Pero quizás para ello me bastará volver a cerrar mis ojos y seguir soñando despierto, esté donde esté! Despierto a mis emociones, a mis pensamientos, a mis sentidos y a todo aquello que ocupa mi Alma entera, durante tanto tiempo esperando ese momento… y lo que me quede aún por vivir! Y en él, volvería a sentir lo que cada día siento dentro, a pesar de la distancia y del tiempo!
Y, como vengo haciendo desde que ella entró en mi vida sin avisar -pero abriendo mi corazón de par en par por vez primera- rememoraré este soñado instante ante cada flor, cada soplo de aire limpio, cada sonrisa compartida, cada ola del mar, cada estrella que vea en el firmamento… que llegue a mis sentidos! Y, esté donde esté entonces soñando, mi Alma estará con ella! Y entonces me daré cuenta de que da igual dónde y cómo paso mis vacaciones de verano, pues estaré simplemente con ella y con nuestras niñas, esté donde esté! Y caminaremos pausadamente cada día por ese bosque encantado conversando sobre la vida; o dejaremos que el agua del mar cubra nuestros pies jugando en la arena fina de esa playa paradisiaca donde quizás está ahora ella; o permaneceremos sentados en el balancín del jardín, donde ella pasa horas con un libro en las manos mientras sueña lo mismo que yo sueño ahora, mirando de reojo a sus niñas…
Quizás más que desconexión, mis vacaciones de verano sirban para conectarme de nuevo conmigo y con mi amor, con mi deseo alcanzable, con mi vida… con todo lo que siempre había soñado en ella! Su mirada amorosa, la de mis niñas, la Naturaleza que nos rodea y todo lo que hoy y a cada instante hace vibrar mi corazón y me permite sentir mi vida plena! Tal vez me doy cuenta ahora de que durante el resto del año es cuando podría estar realmente desconectado de mi esencia, de mi amor y de mi felicidad verdadera -esa que habita en mi interior- si no fuera porque las comparto siempre y en todo momento con ella, aún en la distancia, siempre con amor!
Pero, aunque este sueño de reencontrarme con ella ahora fuera una muestra de amor -además de una provocación a la vida y a su debido tempo-… ¿no sería amor verdadero soñar todo esto sin hacerlo realidad, esperando en silencio que fuera su Alma quien me invitara a reencontrarme al fin con ella y con mi vida soñada, allí donde esté, donde nace el arcoiris y esté para siempre nuestro corazón?