Valoración de acciones del Ibex 35

Publicado el 22 octubre 2013 por Pablodelbarrioq @flashdebolsa

Valoración de acciones Ibex 35
Existe un método de valoración de empresas que combina dos ratios muy utilizados por los inversores en bolsa. Por un lado el PER, que mide el número de veces que el beneficio de una empresa está contenido en su precio de cotización o valor actual, y la rentabilidad por dividendo, que es el porcentaje que resulta de dividir el dividendo distribuido por la empresa entre su precio de cotización o valor actual.
¿Cuál es la fórmula de este método de valoración de empresas?
PTA = (PAA x RPD = DPA) / (K = 1/PER)
PTA>Precio Teórico de la Acción
PAA>Precio Actual de la Acción
RPD>Rentabilidad Por Dividendo
DPA>Dividendo Por Acción constante
K>Tasa constante exigida (por los inversores, por el mercado) de Rentabilidad en la actualidad, medida por la inversa del PER, es decir, si una empresa cotiza a 10 veces PER, entonces la rentabilidad teórica necesaria, o exigida, para recuperar la inversión será del 1/10 = 10% o lo que es lo mismo, que la empresa haga crecer sus beneficios a una tasa del 10% anual (no acumulable) durante los próximos 10 ejercicios.
Pongamos un ejemplo con las acciones del Banco Santander:
PAA>6.75€
RPD>8.93%
PER>15.75
PTA = (6.75 x 0.0893) / (1 / 15.75) = 0.602 / 0.0634 = 9.49 €. Por lo que tendría un potencial desde los 6.75€ actuales hasta los 9.49€ del +40%.
Este modelo es una forma de simplificar el descuento de flujos de caja y forma parte del análisis fundamental denominado como análisis "bottom up" (el análisis opuesto es el "top down", en el que se parte del análisis macroeconómico para llevar a cabo la selección de valores a través del filtro por regiones y sectores para, finalmente, elegir las compañías más atractivas).
Sin embargo, este modelo no es aplicable a empresas que no pagan dividendo (quedan excluidas de este análisis), tampoco se ajusta de manera fiable a aquellas empresas con alto crecimiento que reparten pocos dividendos, no considera posibles ampliaciones de capital futuras y existe la dificultad tanto de calcular los beneficios futuros, como los dividendos futuros (pero lo normal es basarse en las previsiones del consenso de analistas, que a su vez no distan demasiado de lo que las propias compañías estiman).
En mi opinión, utilizar la tasa exigida de rentabilidad "K" de manera constante, muestra una valoración cercana a la realidad del mercado -o al menos homogeniza las valoraciones del conjunto de valores objeto de análisis para ver cuáles son más atractivas en un mismo momento y bajo unas mismas condiciones en cuanto a beneficios, dividendos distribuidos y cotización o valoración se refiere-. Del mismo modo, la relación que existe entre el dividendo pagado por acción "DPA" y la "K" representa un valor teórico de la acción en el que los inversores preferirán aquellas empresas que más dividendos repartan -siempre que sus beneficios lo permitan- en relación con la inversa del PER (a mayor PER, más atractivo resulta también invertir por el consecuente mayor precio teórico), con el fin de determinar si está infravalorada -como es el caso de Santander- o sobrevalorada.
Como digo, podemos deducir que un mayor PER, implica un mayor precio teórico de la acción, dado que a unos dividendos por acción constantes, el aumento del precio de cotización descontaría, o adelantaría, unos mayores beneficios futuros que habrán de ser recogidos vía aumento del precio de cotización (mayor PER) cuando no son recogidos vía aumentos de dividendo por acción. Luego la clave para ajustar las valoraciones no lo es tanto la cotización, sino los beneficios (BPA) y los dividendos por acción estimados por el consenso de analistas.
Pongamos un ejemplo. Supongamos que SAN subiera a 8.57€ o, lo que es lo mismo, pasara a cotizar a 20 veces PER, ¿tendría sentido que el potencial de revalorización permaneciera constante teniendo en cuenta que la remuneración al accionista siguiera siendo la misma, es decir, 0.602€ y que el BPA siguiera siendo igual a 0.428€ (que se obtiene de 6.75€/15.75 veces PER)?
Veamos, según nuestro método de valoración tendríamos que dividir 0.602€ / 0.05 (que se obtiene de 1/20) = 12.04€, lo que representaría un potencial del +40% desde los 8.57€, exactamente igual potencial que en nuestro punto de partida, luego no tendría sentido que subiendo el precio de la acción, el potencial de revalorización permanezca constante. Habremos de estar atentos a que las modificaciones del precio teórico provengan más del lado de las previsiones (DPA y BPA) de la compañía en cuestión y no tanto de los cambios del precio de cotización, con el fin de que nuestro modelo se aproxime al valor real de la empresa.
Este modelo favorece, por tanto, a empresas que registran poco crecimiento y que distribuyen más dividendos que el resto. Este tipo de empresas tendrá un mayor potencial de revalorización y es una estrategia que suele utilizarse con blue chips o compañías de gran capitalización, donde los flujos claves son más los dividendos que el potencial de crecimiento de las empresas (existen fondos de inversión que aplican esta estrategia buscando ingresos recurrentes y una menor volatilidad de los retornos esperados).