¡Listo! Lo he dicho. Se siente bien escribirlo.
Afortunadamente sé que no estoy solo en mi adicción. Los datos de uso de teléfonos inteligentes muestran que mientras Android y iPhone dominan el mercado, BlackBerry se ha mantenido (estoicamente) con el 1% del mercado, tal parece que aún hay varios recalcitrantes de nosotros allá afuera.
Sin embargo, para este momento, la historia de BlackBerry es bien conocida y en este año 2015 aún es difícil apreciar que tan grande fue BlackBerry. En tiempos tan recientes como en el 2008 no existía tal cosa como un teléfono inteligente…. Estaba BlackBerry y estaban los teléfonos móviles y nada más.
En la mente de muchas personas era dos cosas completamente diferentes, para esa época solo existía un teléfono que recibía y enviaba emails y ese teléfono era BlackBerry y, aún a pesar de los mejores esfuerzos de Nokia, Samsung, Sony y el resto de las marcas, en realidad nunca pusieron en riesgo del negocio de la canadiense….. hasta que llegó el iPhone junto con la frase inmortal del en ese entonces co-CEO Mike Lazaridis: “¿De verdad necesito leer mi correo a color?” seguido del colapso que sufrió la compañía que trató (ya muy tarde) de perseguir a los consumidores en vez del mercado empresarial con los resultados que ya todos conocemos.
En los últimos años, BlackBerry ha sido virtualmente una entidad invisible en el negocio de la telefonía celular y los recientes esfuerzos –Classic, Passport, Leap y especialmente el Q10 y el Z10- prácticamente se han desvanecido de este lado del Atlántico.
Sin embargo, de una forma un tanto extraña, nosotros, los usuarios de BlackBerry hemos abrazado más de cerca nuestros apreciados dispositivos, especialmente ahora que son especies en peligro de extinción. Cuando llegamos a una reunión o evento, las personas que nos rodean lo notan –y pregunta sobre ello. Hace pocos años, si querías destacar, no tenías uno; ahora es exactamente lo contrario. Tener una BlackBerry es un símbolo de rebeldía para seguir las tendencias establecidas o tratar de encajar en la multitud.
Al menos eso es lo que nos decimos a nosotros mismos.
La pregunta obvia es: ¿por qué apegarse a ellos? Después de todo hay tantos dispositivos de vidrio brillante alrededor hechos por tantas compañías con todo tipo de precios que es mucho, pero mucho, más difícil no usar un iPhone o un Android que usarlo.
Si estas en un trabajo que requiera enviar constantemente mensajes, emails, BBM, WhatsApp y demás mensajes instantáneos, el teclado físico vence a las pantallas táctiles todo el tiempo. Mi velocidad y exactitud siempre es mejor que cualquier pantalla táctil –siempre.
Y cada vez que veo esa lucecita roja (o verde o azul o amarilla dependiendo del tipo de mensaje) indica que es momento de ponerse en acción. Aún recuerdo los días que esa lucecita me hacía tener ganas de aventar mi teléfono contra la pared, ahora, después de haber probado iPhones y Androids, esa luz es un indicativo de que no perderé un solo correo o mensaje. Podríamos decir que he visto la luz.
Tal vez, si no hubiera iniciado mi carrera profesional lanzando emails a diestra y sinietra con mi Pearl o Storm o Bold, para estos momentos ya hubiera migrado al iPhone.
Lo irónico del asunto es que BlackBerry logró un gran sistema operativo con el tiempo. El BlackBerry 10 es tan bueno o hasta mejor que Android o iOS. Para el momento que fue lanzado en 2013 la mayoría de los usuarios ya habían abrazado los otros dos ecosistemas que tuvo como resultado un interés muy bajo por parte de los desarrolladores para llevar sus aplicaciones al sistema operativo de BlackBerry. Por supuesto que hay manera de llevar las aplicaciones de Android a los BlackBerry´s pero no siempre funcionan correctamente. Sin un ecosistema completo, el BlackBerry 10 estaba muerto desde su nacimiento.
Pero, como adictos, somos incapaces de desprendernos de nuestro vicio. Utilizo una BlackBerry Passport todos los días y tengo una Z10 y un Q10 para emergencias. Han sido tiempos difíciles para mantener la adicción.
Y esa es la razón por la cual la BlackBerry Priv es tan emocionante (al menos para nosotros), ya que, en caso de que no lo han escuchado, es la nueva BlackBerry con sistema operativo Android. Las revisiones iniciales han sido muy buenas hasta el momento y mantengo la esperanza de que sea suficiente para mantener a BlackBerry en el negocio. En estas fecha es la única marca en la que confío completamente y solo puedo tener la esperanza de que las cosas salgan bien.
Después de todo, nosotros los Adictos al BlackBerry necesitamos desesperadamente otra dosis.