Nuestra voz de hoy proviene de Vanadis, diosa de la mitología escandinava asociada con la guerra, la muerte, la magia, la profecía y la riqueza, que curiosamente recibía a la mitad de los muertos en combate en su palacio y se presentaba en el campo de batalla conduciendo un carro de guerra tirado por un par de grandes gatos...
...Fue Nils Gabriel Sefström, químico sueco, quien en 1831 descubrió el elemento en un óxido mientras trabajaba con minerales de hierro, eligiendo un nombre elegante y solemne que comenzaba con V, una letra que todavía no había sido asignada a ningún otro elemento...
Sea como fuere, el vanadio es un metal escaso en la corteza terrestre, que se encuentra disperso en minerales de hierro, titanio y fósforo, y en forma de óxido, asociado al plomo. Es de color gris claro, dúctil y resistente a la corrosión, usándose principalmente como catalizador, y, aleado con aluminio o con hierro, mejora las propiedades mecánicas del hierro, el acero y el titanio...
Dicho queda... ¡Hasta el próximo elemento! ;-).