Hoy fue revelado que el Príncipe Harry y Meghan Markle se casarán el 19 de mayo en la famosa capilla de San Jorge, en el Castillo de Windsor.
La pareja ha optado por ignorar la tradición real y caminar por el pasillo un sábado para que más personas en el Reino Unido y en todo el mundo puedan mirar por televisión o incluso venir a Berkshire el día de su boda.
Un asistente real dijo a MailOnline: "Siguen muy agradecidos por los mensajes de apoyo que han recibido de personas de todo el mundo".
Pero los fanáticos del fútbol están desconcertados porque se casarán en el día final de la FA Cup a pesar de que Harry,y el príncipe Guillermo, es el presidente de la FA y suelen presentar su famoso trofeo a los ganadores en Wembley.
Fuentes reales insistieron anoche en que los eventos no se superpondrían, lo que sugiere que la boda podría tener lugar en la mañana, con la final de la Copa al final de la tarde.
Un asistente real dijo que la pareja optó por una boda de fin de semana porque querían involucrar a tantos miembros del público como fuera posible, ya sea viéndolo en televisión o asistiendo en persona a Windsor.
The Mail entiende que Harry y Meghan estaban ansiosos por evitar la posibilidad de tener que declarar un feriado bancario y querían que la boda pareciera más informal.
"La mayoría de las parejas se casan un sábado y no era como si tuvieran que preocuparse de que otra pareja ya haya atrapado la fecha", dijo una fuente.
También podría llevar a un choque de cobertura televisiva de la primera gran boda real desde 2011 y el partido de fútbol más grande del año en Gran Bretaña.
La fecha también significa que Harry y su prometida no se casarán en los días festivos de principios de mayo o finales de mayo como lo desearon algunos británicos que trabajan.
Y el 19 de mayo asegura que la boda no eclipsará el nacimiento del tercer hijo de Duke y Duquesa de Cambridge en abril y le dará a Kate tiempo para recuperarse.