Pues no soy partidaria de celebrar Halloween pero esta tarde y por mis hijos, he preparado varias cosillas que he visto en los blogs de Manu Catman y en el de Débora.
No tengo fotos porque esas cositas iban a ser para la cena pero como ha venido un amigo de mi hijo Javier, se las han comido para merendar y no me ha dado tiempo de hacer las fotos.
Después, aprovechando las cáscaras de las naranjas del zumo de la merienda, hemos hecho unas velas.
Hace poco las ví por la red y alguna vez las he hecho porque también sirven como ambientador, pero hoy por ser Halloween, les hemos hecho caras.
De todo lo que he preparado con ellos, fantasmas de plátano y chocolate blanco, bocas con manzana y dentaduras de chuches, gelatina con gusanos de chuches, arañas con galletas oreo y regaliz sólo han quedado las velas! :-D
Las he hecho con Daniel, mi hijo pequeño y por el buen rato que hemos pasado juntos haciéndolas, quiero que se queden en el blog.
¡Ah! por si no sabéis cómo se hacen estos portavelas:
Se limpia bien la cáscara de la naranja. Se corta dejando una parte más grande que otra.
A la parte más pequeña le hacemos un corte en el centro para que quede un hueco. Creo que en la foto casi se puede ver.
Se coloca la vela en la parte más grande y tapamos con la parte de cáscara más pequeña.
No es necesario hacerle caras, como ya he dicho más arriba, las hemos hecho por ser el día que es.
En la red he visto que también se le pueden poner unos clavos de olor pero esto no lo he probado aún porque no tengo de esa especia en casa.