Velvet Goldmine [Cine]

Publicado el 16 noviembre 2012 por Ahoracriticoyo @AhoraCriticoYo

Si la crítica de ayer era algo diferente, hoy os traigo algo totalmente distinto. Volviendo a la época cumbre del Rock, de Todd Haynes con Christian Bale, Ewan McGregor y Jonathan Rhys Meyers a la cabeza: Velvet Goldmine.


¿De qué va?
Brian Slade (Rhys Meyers) es el cantante más famoso de Glam Rock actual, el cual un día en uno de sus conciertos, es asesinado... O ese se creía. Diez años después, el reportero Arthur Stuart (Bale) tendrá que descubrir porque Slade simuló su muerte, sacrificando así su larga y exitosa carrera como cantante de Glam Rock.La crítica
Velvet Goldmine es, si más no, una película difícil en general, ya sea en su contexto o en como se nos expone. Empezando por la trama, está desarrollada en dos momentos temporales: un primero donde Slade todavía está en activo y vemos todas sus hazañas hasta llegar a lo más alto, también se muestra la evolución de Arthur Stuart como seguidor incondicional de la glamurosa ola musical. Su otra línea temporal no es más que la que nos enseña como el reportero encarnado por Bale va encajando las piezas con tal de descubrir todo aquello que le paso a Brian Slade: su paso por el mundo de la música.

Así que el inicio de la cinta nos sitúa en una época donde el Glam Rock es el género musical del momento, nos enseña su estrella y sin saber porque, la matan: ahí empieza la cinta. La verdad es que con eso uno ya se engancha, aunque luego te den un sermón de vete tú a saber qué. Tu cabeza ya está haciéndose decenas de preguntas con múltiples respuestas. La trama sigue fiel a su inicio y va evolucionando, nos muestra a todos sus personajes, sus virtudes y defectos, pero en especial a Brian Slade y Curt Wild (Ewan McGregor).Brian Slade es un personaje digno del mundo cinéfilo. Su caracterización es impresionante, sus movimientos, canciones, puesta en escena y sobre todo, su boca solo abre la boca para decir frases totalmente interesantes, tal y como es su personaje. Curt Wild sin embargo es alguien que se deja mover por el mundo de las drogas, alguien a quién apenas tenemos la ocasión de ver en su sano juicio. Tal y como indica su nombre, es un alocado músico que no tiene vergüenza alguna, capaz de desnudarse en un concierto en directo (y sin censuras de ningún tipo, la escena es una pasada).

Sin embargo y por desgracia, la película no acaba de congeniar con el espectador (yo mismo) y acaba decepcionando bastante. La cosa empieza bien, pero cuando los caminos de Slade y Wild se cruzan, la cosa no acaba de cuajar. De repente, todo se empieza a hacer confuso: empiezan a aparecer múltiples escenas sin sentido alguno o, si más no, no las supe apreciar. Además, la película toma un rumbo romántico que, a pesar de todo, tiene algo que acaba picándote la curiosidad (y no se trata de nada homosexual ni orgiástico).
Entonces, la película decae por arte de magia de manera brutal y empiezo a verle fallos: ¿Qué es eso de ver ovnis volando en medio de la nada? ¿Qué pinta el personaje del cantante de Placebo, Brian Molko, ya que este no aporta nada en toda la película (pero nada de nada)? ¿Qué narices significa o simboliza esa joya que se van pasando los protagonistas a lo largo de la cinta? En fin, son de esas cosas que sobran en una película, que te acaban confundiendo considerablemente y que nadie sabe explicar. Eso sí, la banda sonora me parece impecable, faltaría menos tratándose de una película musical (que no un musical, no confundamos).
No obstante, la cinta acaba remontando en su desenlace y se saca de la manga un final que descoloca bastante al espectador, simplemente porque los personajes en cuestión pasan algo desapercibido. Ahí aplaudo al equipo, porque ha sabido como sorprendernos.
Antes de acabar, quiero hacer un inciso para comentar que toda la parte de vestuario está muy lograda. Pero sobretodo decir que todos los disfraces de Slade son impresionantes, hacen el personaje se gane muchísimo su papel.
En definitiva, Velvet Goldmine es una película con un inicio acertado, unos personajes hechos y derechos, pero un tanto confusa y difícil de entender a la larga. Se apuesta por una temática complicada, ya que se juega mucho con el tema sexual. Esperaba bastante más de esta obra, pero a fin de cuentas y para lo que es, no nos podemos quejar.
Información de más
  • En un principio Todd Haynes quería hacer una biografía de la etapa Glam del cantante David Bowie. Por desgracia para él, Bowie ya tenía pensado hacer su propia película de dicha etapa.
  • En la banda sonora de la cinta, tenemos la ocasión de escuchar cantar a los protagonistas de la obra: Jonathan Rhys Meyers y Ewan McGregor. Este último repetirá en la famosa Moulin Rouge.
  • Gran parte de los diálogos de la cinta están sacados de los escritos de Oscar Wilde.
  • La película obtuvo una nominación a los Oscars en la categoría de mejor diseño de vestuario. 

Nota final: 5.Tweet to @AhoraCriticoYo