" Su semblante adoptó un aire de ausencia, como si no estuviera allí, como si Martín Urales de Úbeda, en vez de un nombre propio, fuera un largo túnel en el que hubiera entrado y del que tardará en salir"Imaginemos es la primera palabra de Ventajas de viajar en tren y sobre esta premisa, la de imaginar vidas Antonio Orejudo nos cuenta fundamentalmente dos: la de Helga Pato, editora , y la de Martín Urales de übeda esquizofrenico que inventa vidas y deja su carpeta de casos en manos de la editora. Relatos aislados que en conjunto dan idea de la novela, relatos delirantes que adivinas son de Martín.Imaginemos que Helga coge la carpeta y la lee, imaginemos que se ha librado de su marido en una clínica mental, e imaginemos -los trenes tienen esas cosas- que Helga coge la carpeta y la lee. Al fin y al cabo eso es leer, imaginar lo que otro nos presenta en forma de letras, lo que nos deja ante los los ojos. Y nosotros leemos la historia de Martín en los ojos de Helga. Pero Helga que también es lectora nos cuenta sus cuitas también. Nos cuenta su matrimonio. Nos cuenta lo que odia a su marido. Nos cuenta como marcha con su amante mientras va leyendo el libro perfecto, un libro para editar que le permitirá que nosotros, los lectores compremos colacao a la vez que leemos sobre coprofilia. Imaginemos que esta novela es una trampa, y que usted lector, entra en ella y lee. Lee el delirio y es más, le gusta leerlo. Pero sepa que es una imaginación todo, que todo se crea desde su imaginación. Y dirá: "leer es eso" y yo le responderé "tiene razón, para eso leemos". Porque por encima de la historia, del delirio, usted y yo leemos para imaginar. Y por eso estoy segura que le encantará leer Ventajas de viajar en tren, porque Antonio Orejudo nos plantea en ella lo bueno de leer, que es imaginar. Y se reirá con las ocurrencias de Martín y entenderá a Helga, o no, pero imaginará a lo largo de sus páginas una historia, imaginará a Martín, le pondrá cara y pensará incluso "qué cabrón", pero seguirá leyendo, imaginando. Y al terminar se dirá que sí, que ese imaginemos del principio es la literatura, que usted, y yo, imaginamos en las letras cada vez que nos disponemos a leer un libro. Tusquets reedita esta novela del año 2000. Nos la deja ahí para que imaginemos, para que leamos, para que disfrutemos, para ser un poco más felices y Antonio Orejudo nos da la clave al principio: imaginemos nos dice. La clave de la literatura, no engaña, no dice nada que no vaya a pasar. Imaginen y entren en la lectura. Nunca nadie fue tan claro y directo. Imaginemos, lector, que quiere imaginar. Si no, ¿Por qué lee usted?. Es la clave de la novela, aunque luego nos cuente muchas más cosas, aunque luego nos enseñe lo que puede imaginar una persona que no está cuerda, con reflexiones divertidas sobre nuestra vida, sobre el reciclado, sobre el sexo, sobre la venta de órganos, o sobre la salvación de los huerfanitos. Ideas disparatadas pero que te hacen reflexionar con una sonrisa en el alma. Aunque luego nos deje al final pensando que sí, que ha sido nuestra imaginación la que nos ha llevado a todo ello, y que solo el tren con su traqueteo nos trae la verdad. Si uno viaja en él puede encontrarse con mentiras que le hagan imaginar. Antonio OrejudoVentajas de viajar en trenTusquets Editoreshttp://feedburner.google.com/fb/a/livefeed?id=ri6e1gq8734efuk7f5arnr56ic