ESTA estatuilla encantadora, encontrada en Roma, se colocó en el palacio de Farnese, y así entró en la posesión del rey de Nápoles, junto con la propiedad de ese edificio. No forma parte del gabinete de obras de arte privadas, sino que se coloca en una sala reservada, donde los curiosos solo se introducen bajo la vigilancia de un tutor, aunque incluso esta precaución no ha impedido las formas redondeadas que ganaron para el Diosa, el nombre de Callipyge, por estar cubierta de un tinte oscuro, que delata los besos profanos que fanáticos admiradores han impresionado todos los días allí. LEER MÁS »
http://jossoriohistoria.blogspot.com.es/
ESTA estatuilla encantadora, encontrada en Roma, se colocó en el palacio de Farnese, y así entró en la posesión del rey de Nápoles, junto con la propiedad de ese edificio. No forma parte del gabinete de obras de arte privadas, sino que se coloca en una sala reservada, donde los curiosos solo se introducen bajo la vigilancia de un tutor, aunque incluso esta precaución no ha impedido las formas redondeadas que ganaron para el Diosa, el nombre de Callipyge, por estar cubierta de un tinte oscuro, que delata los besos profanos que fanáticos admiradores han impresionado todos los días allí. LEER MÁS »
ESTA estatuilla encantadora, encontrada en Roma, se colocó en el palacio de Farnese, y así entró en la posesión del rey de Nápoles, junto con la propiedad de ese edificio. No forma parte del gabinete de obras de arte privadas, sino que se coloca en una sala reservada, donde los curiosos solo se introducen bajo la vigilancia de un tutor, aunque incluso esta precaución no ha impedido las formas redondeadas que ganaron para el Diosa, el nombre de Callipyge, por estar cubierta de un tinte oscuro, que delata los besos profanos que fanáticos admiradores han impresionado todos los días allí. LEER MÁS »