Ros-Lehtinen insiste con los “enemigos” de EEUU: “tarde o temprano ese día de justicia les llegará”
Jean-Guy Allard.- Hace unos días Ileana Ros Lehtinen lloraba en Miami la muerte del terrorista Orlando Bosch, gracias a quien se buscó un escaño en la Camara de Representantes. Ahora celebra con frenesí la muerte de otro terrorista, Osama Bin Laden. Y amenaza a los “enemigos” de Estados Unidos de que “tarde o temprano ese día de justicia les llegará”.
La representante de la Florida que los Republicanos pusieron de presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Baja, Ileana Ros Lehtinen, dijo que la muerte de Bin Laden envía un mensaje “a grupos antiamericanos y antidemocráticos de que Estados Unidos no ha bajado la guardia”.
La congresista por Florida que apoyó de manera determinante al dictador hondureño Roberto Micheletti, “los grupos que quieren hacerle daño al país” que “Estados Unidos está vigilando sus acciones y tarde o temprano ese día de justicia les llegará”.
Según la cubanoamericana ultraderechista, conocida por su fanatismo en la defensa de las acciones más violentas de Israel, subrayó que muchas personas pensaron que Estados Unidos “se había olvidado de Osama Bin Laden después de 10 años” hasta que “al fin el día de hacer justicia le llegó”.
Olvidando sus perjuicios hacia el Presidente, Lehtinen felicitó a Barack Obama, así como al ejercito por la operación, pero repitó que la “lucha” contra Al Zawahiri quien, dice, asumió la jefatura de Al Qaeda, “y otros grupos como el Talibán, Hamas y Hezbollah”.
Con su cinismo habitual y su odio visceral a los musulmanes, comentó que “va a ser interesante ver como se maneja esta situación de tropas americanas entrando a Pakistán eliminando al terrorista y líder espiritual de Al Qaeda. Vamos a ver el daño que esto le va a hacer a Pakistán”.
Hace unos días, la congresista que califica a Venezuela de terrorista, lloraba a Orlando Bosch, el terrorista que ordenó la destrucción en vuelo de un avion cubano, en 1976, provocando la muerte de 73 personas.
“Siempre consideramos a Orlando Bosch como uno de los más firmes combatientes contra el régimen cubano”, declaraba, junto a su padre, un colaborador de la sangrienta dictadura cubana de Fulgencio Batista, en una declaración emitida al anunciarse el fallecimiento de Bosch.
En 1989, la entonces candidata al congreso Ileana Ros-Lehtinen encabezó, con Connie Mack padre, la campaña para la liberación en EE.UU. del terrorista Orlando Bosch, detenido por la Inmigración después de su regreso de Venezuela, gracias a Otto Reich que compró su liberación.
Mack padre y Ros-Lehtinen celebraban entonces, públicamente, como “héroe” al Jefe de la CORU, la organización terrorista cubanoamericana que más muertos y más daños causó en el último siglo de guerra sucia de EE.UU. contra Cuba.
En marzo de 2006, Ros-Lehtinen llamó a matar al líder historico de la Revolución cubana, Fidel Castro en el curso de una entrevista para el documental británico 638 Ways to Kill Castro.
«Hace años que digo esto y no tengo ninguna vergüenza de mis palabras», insistió cuando se la interrogó sobre la veracidad de sus declaraciones.