No extraña ver determinados libelos periodisticos en lugares marginales como Palestinalibre.org o Rebelion.org, vertederos naturales por antonomasia para un tipo de periodismo no caracterizado por el rigor informativo y la objetividad.
Pero ver ese tipo de noticias en medios de difusión masiva y presuntamente respetable como es el diario El Mundo causa extrañeza, indignación y bochorno.
Y es que Rosa Meneses ha publicado un libelo que dista mucho de la honorable labor informativa, convirtiendo la labor periodistica en un lamentable oficio panfletario y sectario, cuyos objetivos no paracen ser la informacion honesta y rigurosa
El articulo que se llama “Hebrón, ciudad fantasma” y se puede leer en este enlace recurre a los consabidos clichés de la propaganda anti sionista: “segregación”, “apartheid”, “colonos”, “check-point”, “limpieza étnica”, etc, etc
Es particularmente lamentable por su carácter sesgado. En ningún momento del artículo se recoge la opinión de ningún judío residente en Hebrón, ni da opción de réplica a la visión pro israelí del asunto.
Para evitar, (imagino) críticas en este aspecto, la autora reproduce las declaraciones de un palestino y de un israelí, pretendiendo con ello aparentar una inexistente neutralidad exigible a cualquier periodista que se precie.
Huelga decir que el israelí que aparece en el artículo es un fervoroso activista de la organización radical “Breaking the silence” furibundamente crítica con el estado de Israel y con métodos informativos que podrían muy bien ser calificados de “goebbelsianos“.
La sra. Meneses en un ejercicio propagandístico que causa sonrojo evita explicar en su artículo el problema de fondo de Hebrón, que no es otro que el condenable hecho de que un judío , por el mero hecho de ser judio, necesite protección para salvaguardar su vida en una ciudad intrínsecamente ligada al pueblo judio.
Ese si es un autentico apartheid: EL APARTHEID PALESTINO CONTRA LOS JUDIOS EN HEBRON.
Para aquellos que no lo sepan, como parece ser el caso de la sra. Meneses, Hebron puede ser considerara la segunda ciudad mas sagrada del judaísmo.
Los judíos no son, pese a la visión de la sra. Meneses, unos alienígenas extraños a esa tierra llegados alli con animo de encarcelar a una población, esquilmar recursos y chuparles la sangre.
Los judíos forman parte de Hebrón, desde antes que existiera ningún inventado pueblo palestino, es más, los judíos forman parte de Hebrón desde antes de la conquista de esas tierras por colonos árabes bajo el yugo del Islam.
Desde hace miles de años (casi 4.000) hay presencia ininterrumpida (hasta el 1929 en que la población judía fue literalmente masacrada y expulsados los supervivientes por los árabes), y durante muchísimo tiempo mayoritaria, de judíos en un ciudad que el historiador Paul Johnson considera como “un ejemplo de la obstinación judía a lo largo de cuatro mil años”: ningún pueblo ha mantenido durante tanto tiempo un vínculo tan emotivo con un determinado rincón del planeta.
La ciudad de Hebrón es de capital importancia para el pueblo judío y ahí está la Historia para refrendarlo, fue la ciudad elegida por el rey David como capital de su reino hasta la toma de Jerusalem hace 3.000 años), el lugar elegido por Abraham para asentarse él y los suyos.
Allí, en Hebrón, podemos encontrar sitios tan significativos para el pueblo judío (y a menudo vandalizados por los palestinos) como La Tumba de los Patriarcas (Me’arat ha-Makhpela) donde se hallan enterrados personas tan importantes al judaísmo como los bíblicos Abraham, Sara, Isaac, Rebeca, Jacob y Lea.
Para que nos hagamos una idea, pretender que los judíos que allí residen son colonos es como pretender que lo sea cualquier arabe musulman en La Meca o en Medina, lugar donde se halla enterrado Mahoma.
Pero es que además de la Tumba de los Patriarcas hay un vasto complejo de restos, edificios y vestigios judíos: la sinagoga Avraham Avinu construida por Hakham Malkiel Ashkenazi en el barrio judío de Hebrón en 1540, y que posteriormente se convirtió en el centro espiritual de la comunidad judía, hasta la invasión jordana de 1948 que destruyeron el lugar y lo convirtieron en un mercado y un vertedero para hacer escarnio del pueblo judío y desvincularlo de su tierra. El Avraham Clinic – Beit Hadassah construida en 1893, abandonado tras la limpieza étnica de judíos en 1929, también el cementerio judío de Hebrón, la Escuela Yeshivat Knesset Yisrael (ocupada hoy en dia por colonos árabes), Elonei Mamre, la tumba de Othniel, Eshel Avraham, Beit HaShisha, Tel Hevron-Admot Ishai (Tel Rumeida), la tumba de Avner ben Ner, etc, etc, etc,
Es tanta, tan fuerte, y tan intensa la relación del pueblo judío con Hebrón que solo un profundo ignorante o un sectario propagandista la ignorarían.
El panfleto firmado por la sra. Meneses hace especial hincapié en la problemática que tienen los palestinos en transitar por unas pocas calles de Hebrón bajo administración israelí tras los acuerdos de Oslo, esas calles del casco antiguo es donde se ubicaba la antigua comunidad judía antes de su limpieza étnica de 1929 en la que ni los niños judíos fueron respetados.
Para ello, la autora, no muestra sonrojo alguno en soltar la siguiente, y sectaria frase “Los palestinos están sometidos a un severo régimen de segregación según el cual no pueden caminar o circular en coche por estas calles. Sus propios barrios. Mientras, los israelíes y los extranjeros pueden moverse libremente”. Cualquiera diría que los palestinos no pueden circular por Hebrón a tenor de lo leído, mas aún cuando la sra. Meneses pone la siguiente imagen (también mutilada) de un plano del casco antiguo sin mencionar que solo es una pequeñísima parte (3%) de la ciudad:
La realidad es otra y dista mucho de que los judíos “puedan moverse libremente”.
Tras los acuerdos de Oslo, aceptados voluntariamente por la parte palestina, Hebrón fue divido en zonas bajo administración palestina, israelí o mixta,
La zona H1, la mayor superficie de la ciudad, queda bajo control absoluto palestino. La zona H2 bajo control mixto, y solo un pequeño porcentaje de la misma (3%) queda bajo control israelí por la especial significación de esa zona con el pueblo judío.
Son precisamente los judíos quienes no pueden desplazarse, o tienen restricciones para hacerlo … ¡EN EL 97 % DEL TOTAL DE LA CIUDAD DE HEBRÓN! en un patente ejemplo de lo que es un sistema de apartheid practicado de forma general (y no solo en Hebrón) por el inventado ente palestino
En todo caso necesitan protección militar, y no por que sufran discriminación por ser judíos, que la sufren, sino porque les va la vida en ello.
La sra. Meneses habla de las rejas que ponen los palestinos en sus ventanas para, según ella, defenderse de las pedradas de unos inexistentes colonos, ignorando que precisamente esos son los motivos por los que los pocos judíos que sobreviven allí ponen tambien rejas en puertas y ventanas. Con la salvedad, también ignorada por la sra. Meneses de que la población palestina no necesita de presencia militar para salvar, no sus cristales, si no sus mismas vidas como sí ocurre con la población judía.
También ignora que la, otrora animada y comercial, calle Shuhada y ahora con locales cerrados y vacíos tiene un antes y un después de la violencia, el terrorismo y la intifada de los palestinos, algo no mencionado por la misma y que tuvo consecuencias devastadoras para el comercio de la zona
Y es precisamente esa amenaza permanente de limpieza étnica que pende sobre la población judía la que hace necesaria la presencia de “check points” y soldados que originan tantos retrasos y molestias a los palestinos. Molestias y retrasos que intuyo mas importantes para la sra. Meneses que la simple vida de unos judíos a los que pretende inferiorizar tachándolos de “colonos”.
¿Condenará la sra. Meneses el inmoral apartheid palestino que amenaza la vida, restringe los movimientos y destroza la economía de los judíos de Hebrón por el mero hecho de ser judíos?
Me temo que no.