El pasado 16 de marzo, el líder indígena Ládio Veron, portavoz de los Guaraní-Kaiowa, compareció a las 17,00 horas en una sala contigua al hemiciclo del Congreso de los Diputados, en el Palacio de las Cortes, para denunciar todo tipo de violencia a la que es sometido su pueblo para expulsarlos de sus tierras ancestrales.
Ládio lanzó un llamamiento a la comunidad internacional para que no permita que este genocidio se concrete ya que la expulsión de sus tierras significa la muerte lenta de sí mismos y de su cultura. Los sucesivos gobiernos brasileños no han cumplido con sus obligaciones contraídas en la Constitución de 1988 y no han delimitado el territorio Guaraní-Kaiowa exponiendo a sus miembros a todo tipo de violencia que varios sectores de la sociedad usa para expulsarlos. “La falta de demarcación es una razón y una motivación de nuestro genocidio. La ineficacia de las garantías del Estado significa más muertes y dificultades de supervivencia para nuestro pueblo”, declaró. El 65% de sus miembros viven en “reservas”, amontonados en pequeñas áreas alrededor de sus territorios, mientras enormes haciendas particulares y plantaciones de caña y de soja transgénica se expanden, vertiendo ríos de intoxicación y destruyendo las selvas milenarias.
LLAMAMIENTO DE LÁDIO VERON EN EL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS
PEDRO POZAS TERRADOS (NEMO)
Fotografía: Pedro Pozas Terrados