Los verrines son unas originales propuestas de origen francés y consistiría en servir los alimentos de una forma mas o menos coqueta en pequeños vasos transparentes,dejando ver sus distintas capas.
Con algo de imaginación podemos formar un vasito sorprendente,tanto dulce como salado y las variaciones son infinitas.
Eso si, debemos de montarlo en un vaso de cristal ,mejor de tamaño pequeño y tomarlo con cucharilla de postre.
La verrine que os propongo hoy es de café y nata,con un toque de chocolate.
Verrine cappuccino
INGREDIENTES:( para 6 vasitos)
-150 ml de leche entera
-150 gr de nata liquida
-Una cucharada sopera de café instantáneo
-4 yemas de huevo L
-30 gr de azúcar
-180 gr de chocolate con leche picado en trozos pequeños
Para decorar: 200 ml de nata liquida y 50 gr de azúcar y un poco de cacao en polvo para espolvorear.
COMO SE PREPARA:
En un cacito vierte la leche ,la nata líquida y la cucharada de café instantáneo.Calientalo hasta que comience a hervir.Retiralo del fuego y dejalo templar un poco.
En otro cacito bate las yemas de huevo con el azúcar hasta que estén un poco blanquecinas,añadele la mezcla anterior y ponlo al fuego medio a cocer durante unos minutos hasta que se forme una especie de natillas o crema inglesa.
Cuando veas que ya esta cocida, vete echando una parte de esta crema sobre el chocolate picado,remueve para ir mezclando todo,añade la crema restante y esta mezcla repartela en seis vasitos.Dejalos templar y pasalos a refrigerar durante 3 horas mínimo.
Cuando vayas a servir,monta la nata con el azúcar y viertela con una manga pastelera con boquilla rizada sobre la crema,espolvorea cacao puro.
Yo los decore con unos bomboncitos de café que me he traído de mi ultimo viaje a Amsterdan y que los compre en el curioso American Café,un local que si teneis oportunidad deberiais de ir a visitar,esta en el centro de la ciudad y es del impresionante estilo Art Deco.
Ah!! y las claras que os han sobrado no las tiréis,meterlas en un bote de conservas y congelarlas,que a lo mejor dentro de unos días volvemos a hacer macarons.