Luego observo ‘algunos islotes’ con enormes superficies techadas de edificios industriales, o silos, e instalaciones agrícolas o de diversos tipos de almacenaje y transporte. Para empezar en las mismas gasolineras, y entonces me pregunto por qué no mayor extensión y utilidad de la energía solar para este país.
Imagino esos miles de metros de techumbre atizados por un sol inclemente produciendo algo útil, desde agua caliente a energía eléctrica, si estuvieran ocupados por placas e instalaciones adecuadas. Sin contaminación, ni siquiera visual. Supuesto una política de impulso a todo el territorio, al ampliar el mercado, sus costes se reducirían considerablemente, permitiendo enormes pasos de avance a la tecnología española.Energía verdaderamente autónoma, sin dependencias externas, limpia, sin contaminar a nada ni nadie y con capacidad para producir y satisfacer necesidades localmente, sin necesidad de transporte, lo cual implica pérdidas ocupación de espacios, encarecimiento, dependencia... Estamos entre los países de cabeza en el desarrollo tecnológico de estas energías alternativas, las diferentes solares, deberíamos aprovechar la oportunidad de la crisis para dar un empujón y extenderla por tantos polígonos industriales, explotaciones agrícolas y ganaderas y grandes edificios como tenemos diseminados por nuestra amplia geografía.Es cierto que quizás todavía no ha llegado su desarrollo pleno para ser totalmente operativa y rentable, pero si no se apuesta por ella nunca llegará su momento. Sí, tiene subvenciones y eso la encarece, pero todas las energías en España están subvencionadas, incluida la producción hidroeléctrica que usa del agua común de todos por graciosas concesiones franquistas, y a partir de aquí el resto, que pagamos al mayor precio de producción de las mas ineficientes, así que instalaciones ya amortizadas hace muchísimos años cobran su producción a precios altísimos gracias a estas desviaciones de precios o subvenciones encubiertas.Ninguna otra fuente de energía puede ser tan autónoma, recuerden ustedes que el mito de la autonomía de la energía nuclear oculta la necesidad de uranio que producen otros países y necesita sobre todo un proceso de enriquecimiento, plutonio, que tienen otros países altamente especializados, al igual que son otros quienes tienen los almacenes adecuados para almacenar residuos.