En la pequeña excursión fotográfica que pretendo realizar cada semana a través del blog, hoy quiero invitarles o recorrer una carretera tan espectacular como hermosa. Transcurre por el impresionante acantilado de la costa del Noroeste de Gran Canaria y conduce desde la localidad de Agaete a la de La Aldea. El trayecto es endemoniadamente complicado por la gran cantidad de curvas sobre el risco, lo que la hace además de las que te ponen un nudo en la garganta apenas se te dispare la imaginación de lo que puede suponer salirse del carril.
Por esa carretera han circulado durante décadas los aldeanos para dirigirse al norte de la isla o a Las Palmas de Gran Canaria, así como todos los que por placer o necesidad se desplazaban a La Aldea. Es cierto que también se puede tomar una ruta alternativa a través del sur de la isla, pero el rodeo alarga considerablemente la duración del viaje.
Los aldeanos venían reivindicando esta nueva carretera desde hacia mucho tiempo como vía para superar el aislamiento al que se veían sometidos cada vez que la vieja calzada quedaba cortada durante días por desprendimientos de rocas en días de lluvia. En esos casos se veían obligados a tomar la carretera del sur, lo que como hemos dicho eternizaba el viaje.
Contra lo que pueda parecer y a pesar de su peligrosidad, han sido relativamente pocos los accidentes mortales que se han producido en esa carretera, en gran medida por el extremo cuidado que los conductores siempre han puesto al circular por ello y en parte también gracias a la suerte.
Las fotografías que acompañan este post fueron tomadas unos meses antes de que la carretera se abandonara por la vía alternativa y por ella ya no circula nadie en la actualidad. Entre las fotos se incluyen imágenes de los acantilados por los que transcurre la carretera que, de paso, sirven para que quienes no conocen Gran Canaria descubran que la isla tiene un paisaje mucho más variado que el de sol y playa que figura en los folletos turísticos.
Espero que les gusten....