Siempre que puedo, prefiero hacerlas caseras, pero no siempre tengo tiempo suficiente para preparar la cena con antelación y reconozco que en casa suelo tener algún brik de cremas preparadas.
Las cremas, las mires por donde las mires, suelen ser bastante aburridas. Yo las cocino pensando en las niñas, así que son con ingredientes sencillos... Pero claro, entre que yo hago comida para un regimiento y que ellas comen poco, me suele sobrar... Pero gracias a Knorr he podido asistir a un taller de cocina para aprender a tunearlas!!!
Nos convocaron en el aula Canela Fina, un local en el centro de Barcelona acondicionado para eventos culinarios. La idea era ver las posibilidades de las cremas y, como de un producto sencillo, podemos crear una receta espectacular. Evidentemente las cremas que utilizamos son las de Knorr, en concreto las de Calabaza, tomate con mascarpone, cebolla y la crema de bogavantes y cigalas.
Con cada crema, el chef Jaume Drudis nos propuso diferentes opciones para hacer de los platos con cremas una obra de arte. En la web de Knorr podéis ver más propuestas , aunque yo hoy os voy a proponer las que hicimos en el taller.
Para empezar, con una crema de calabaza o crema Alicia, podemos ampliarla creando una base de verduras que hemos blanqueado previamente. Podemos usar zanahorias, calabacines, col,... También podemos fabricar unos tortellini con pasta wantan ( se puede comprar en supermercados de productos asiáticos ) y rellenarlos con las verduras ( o con lo que se os ocurra... Yo lo hice con jamón y mascarpone!!! ). Podemos darle más color añadiendo brotes verdes o alguna hierba aromática fresca
Una bonita idea de presentación es poner el plato con las verduras y el/los tortellinis y la crema de calabaza aparte, así, podemos ver lo que hay en el fondo del plato y añadir la cantidad de crema que queramos.
Con la crema de tomate y mascarpone, por ejemplo, nos propusieron hacer unas bolitas fritas de mascarpone, una receta fácil y que queda también muy resultona. Si a vuestros hijos les gusta el queso, seguro que esta receta les gustará
Para hacer las bolitas de mascarpone, es tan sencillo como ponerlo en una manga pastelera, cortar la punta con un grosor grande, de unos 4-5 cm de diametro, y sobre un plato con harina, hacer un "churrete " de queso. Con unas tijeras cortamos en porciones que vamos a dar forma de bola. Luego pasamos cada bola por huevo batido y, por último, por pan rayado. El toque final es freír las bolitas en un poquito de margarina ( nos comentó que así el sabor es más suave que si lo hacemos en aceite ).
Ahora solo tenemos que emplatar, poniendo las bolitas en un plato y servir con la crema.
También nos propusieron un plato con la sopa de cebolla Knorr... A mi, en principio la sopa de cebolla no me atrae lo más mínimo, pero después de probar la propuesta del chef, debo reconbocer que estaba exquisita
Para reversionar la sopa de cebolla, elaboramos un " crostrini" preparando unas rodajas de pan muy finas, impregnadas con aceite de oliva o margarina. En una placa de hornear disponemos el papel sulfurado y esparciendo especias enteras o en grano sobre el mismo. Sobre las especias situamos el pan y horneamos a fuego moderado hasta que queden crujientes.
Por otro lado, preparamos unas galleta de parmesano. Rallamos el parmesano con un rallador muy fino, mientas calentamos una sartén, cortamos círculos de papel sulfurado, disponemos el parmesano sobre los papeles y esperamos hasta que se funda. Una vez lo tenemos lo dejamos enfriar. Si queremos darle un toque diferente, podemos añadir una hojas frescas de hierbas aromáticas antes de poner el parmesano.
Calentamos la Sopa de Cebolla Knorr 1l y al servir le ponemos el crostrini y la galleta de parmesano, consiguiendo un delicioso plato ideal para un día frío de invierno.
Para finalizar con una receta más para adultos, utilizando la crema de bogavante y cigalas de Knorr, podemos crear un plato con el que sorprender a nuestros invitados. Puede ser una receta que se adapte perfectamente a las fiestas navideñas.
En una sartén, salteamos la nuez de vieira, las gambas y los espárragos con un poquito de escaloña picada. Desglasamos con vino blanco, añadimos unas gotas de limón y hierbas aromáticas.
Paralelamente, calentamos a fuego lento removiendo de vez en cuando la Crema de Bogavante y Cigalas con un Toque de Vino Blanco.
Servimos la crema y añadimos las vieiras, gambas y espárragos salteados. Como en las otras recetas, quedará mucho más bonito y vistoso si presentamos en un plato hondo el salteado y la crema en una jarra aparte para que cada uno pueda añadir la cantidad al gusto.
Espero que os gusten estas propuestas y os animo a compartir aquí como hacéis las cremas en casa y con que soléis acompañarlas.