Fotografía de google
El escritor Fernando Marías presentó el acto como una velada teatral relacionada con la literatura y la narración de historias. Existe una pequeña frontera que separa la realidad de la ficción; la verdad de lo que tal vez nos es menos real.
Hijos de Mary Shelley parece una compañía teatral que cuenta historias de terror pero en realidad no es así. Busca monstruos verdaderos. Acoge a personas que tienen un monstruo en su interior, personas de aspecto oscuro con la ambivalencia de serlo realmente.
El monólogo Abril en Estambul de Espido Freire abre la velada.
Un viaje a Estambul. Una historia ¿real? Y dos frases inquietantes:
«¿Había matado antes alguna vez? Sí, en mis libros, mato».
«Me llevaría mi ropa. Los recuerdos comprados y una gruesa capa de silencio…»
El bloque de poesía reúne a Raquel Lanseros, Luis Alberto de Cuenca y el rapero Shone en un homenaje a la palabra, la misma que reunió allá por 1816 en Suiza, cerca del Lago Ginebra a los moradores de Villa Diodati: Byron, Shelley o Polidori entre otros.
A dos voces, poesía y rap, el poema de Luis Alberto de Cuenca El desayuno
«Tengo un hambre feroz esta mañana
voy a empezar contigo el desayuno…»
La bella dama sin misericordia, poema de John Keats, basado en un texto medieval francés y traducido por Raquel Lanseros se muestra también en versión rap adaptada e interpretada por el también poeta Shone.
La actriz Ruth González es La Sirena Negra. Este monólogo de Vanessa Montfort, junto con la interpretación de la actriz, cautivó al público que llenó el auditorio:
«No siempre escuchan mi canto. Sólo cuando quiero que lo escuchen…»
No te olvides bebé
que tu madre te quiso
no te pudo tener
y te dio la libertad…
«La desesperación lleva a las personas buenas a la locura…»
Duerme ya mi bebé
mecidito en las aguas
nadarás como los peces
por toda la ciudad…
Merecida ovación, gritos de bravo y puesta en pie del auditorio.
Broche de oro para Villa Diodati: Velada literaria con Hijos de Mary Shelley.