Revista Deportes

Villaplane, el futbolista que apoyó el régimen nazi

Publicado el 17 marzo 2015 por Squadraeterna @squadraeterna

Villaplane, el futbolista que apoyó el régimen nazi

Capitán de Francia en el primer Mundial de la historia en 1930, pocos años más tarde se unió a la terrible Gestapo. Medio derecho fino, ordenado, de buena técnica y con un gran juego aéreo, había nacido en Argelia pero se hizo futbolista en Francia. Militó en el FC Séte, el Nimes, el Racing de Paris o el Niza y debutó con los 'bleus' ante Bélgica en 1926. Luego participó en los Juegos Olímpicos de Ámsterdam y en la mencionada Copa del Mundo de Uruguay donde los galos cayeron en la fase de grupos.

Durante su carrera futbolística ya estuvo implicado en problemas relacionados con las apuestas, la compra de partidos o el hurto. Fue detenido por un caso de apuestas de caballos en París y también fue protagonista del primer amaño de un encuentro en la historia del balompié galo. El Olympique Antibes luchaba por ser campeón en su categoría y en la última jornada venció por 5-0, resultado que tiempo después se supo que estaba acordado. Se le consideró uno de los cabecillas junto a Henric y Cazal y su reputación en Francia cayó en picado.

En 1939, el estallido de la II Guerra Mundial le cogió en prisión. Por entonces se encontraba arruinado e ingresaba y salía de la cárcel cada cierto tiempo por temas de corrupción o pequeños robos. Un año después la ocupación alemana en la capital francesa le dio barra libre para continuar con sus actividades delictivas. El conocido criminal Henri Lafont pidió a las altas esferas nazis la liberación de varios delincuentes entre los que se incluía a Villaplane.

Villaplane, el futbolista que apoyó el régimen nazi

A partir de ese momento entró a formar parte de la Gestapo francesa y de un grupo conocido como la Brigada del Norte de África. La organización tenía como principal objetivo el localizar y matar a miembros de la Resistencia francesa y extorsionar y torturar a las personas judías. Con ello ganó mucho dinero y recuperó el estatus económico de tiempo atrás que tanto ansiaba.

Su buen hacer le hizo lograr un ascenso y convertirse en uno de los cinco líderes de la BNA. Entre sus actos más despiadados figuran la "Matanza de Oradour sur-Glane", donde engañó a cambio de dinero a 52 detenidos por las SS que luego fueron asesinados y el rapto y posterior ejecución de once muchachos en Aquitania. Los chicos de entre 17 y 27 años recibieron todo tipo de torturas antes de que Villaplane fuese el primero en dispararles a bocajarro.

La Resistencia fue minando a la organización criminal pero al ex capitán francés aún le dio tiempo a engañar a numerosas familias judías. Su plan consistía en ganar la confianza de los miembros de la familia y erigirse en un salvador. Les proponía un intercambio de dinero o joyas por un traslado a Portugal, un país neutral. Sin embargo los judíos finalmente no se movían de París y eran trasladados mediante tretas a la sede de la Gestapo en la capital gala.

El cambio de signo en el conflicto bélico y la liberación parisina en 1944 dio al traste con el plan de vida de Villaplane. El BNA quedó disuelto en verano y muchos de sus colaboradores se marcharon a Alemania. El ex jugador se quedó y rápidamente fue detenido por las autoridades francesas. Esgrimió que lo que se contaba sobre él no era cierto y que había ayudado a huir a los judíos de París, pero nadie le creyó.

A finales de 1944 fue juzgado por el Tribunal de Justicia del Sena que le acusó de ser un colaborador de los nazis y el responsable de por lo menos diez asesinatos. La Corte le condenó a muerte y la sentencia se ejecutó en el cuartel de Montrouge el día 26 de diciembre, donde fue fusilado junto a su amigo Henri Lafont y el ex teniente de las SS, Pierre Bony.

Villaplane, el futbolista que apoyó el régimen nazi


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas