Aunque su trabajo bien podríamos haberlo enmarcado en la categoría ‘Design it’, porque sus esfuerzos profesionales van de la mano del mundo de la ilustración y de alquilar los lápices al mejor postor, su faceta artística nos ha llamado mucho más la atención. Nos referimos a Pablo Pino, a ratos viñetista y de profesión sus dibujos.
El apartado de cómics de nuestro blog se nutre tanto de novedades en el sector, como de revisiones más o menos galantes de títulos que hemos leído y también de eventos y frikadas varias que a veces nos acontecen y que ahí relatamos, pero en el aspecto de las Publicaciones, no siempre hay que prestar atención al último lanzamiento de las grandes editoriales, puesto que en internet y amparados por la amplitud de onda que aporta la red para expandir mensajes, hay una infinidad de comiqueros administrando fanzines virtuales, bitácoras de humor o webcómics más o menos periódicos y aunque no tienen contrato editorial ni puesta de largo en los medios, sus creaciones son verdaderas joyas de la viñeta.
Hace tiempo hablamos de ‘El joven Lovecraft’ como uno de estos ejemplos de cómics en la red y que además, por suerte para sus seguidores, ha conseguido dar el salto al papel con tres volúmenes publicados y a nosotros hace poco se nos fue la boca en Twitter al respecto de dedicarle entradas a algunos de estos dibujantes de cómics en la red.
Para ir saldando deudas, empezamos con este ilustrador madrileño, treintañero e impertinente, que afila a cuchillo sus lápices y ofrece una colección seriada de viñetas, más o menos esporádicas (a cada uno el talento le viene o lo muestra cuando le apresta) y que concilian al dibujante de gaceta con el quisquilloso diletante. Directas, certeras, su blog está cargado de tiras cómicas en un sólo acto que aceran un lenguaje casi no verbal. Más imágenes que palabras, como compete al sindicato.
Ha trabajado para el suplemento Magazine de El Mundo, para el Periódico Diagonal o para la revista Madriz, además de múltiples colaboraciones con agencias de diseño, discográficas, editoriales, centros culturales y un largo etcétera a los que ha proyectado su obra, ya sea a nivel artístico o profesional. Pero como os decíamos al principio, os invitamos a disfrutar de su cómic por entregas, de ese fantástico ideario de dibujante curtido y resabiado.
Elegir entre esta selección de viñetas o visitar su web para conocer más a fondo su trabajo, ya va por la viñeta 140…