Virginia mayo (1920-2005)

Publicado el 24 abril 2014 por Sergio @Nadamasquecine


Virginia Clara Jones nació en en San Louis (Missouri), procedía del seno de una familia de clase alta y su padre fue un periodista muy conocido de la ciudad. De pequeña, Virginia ya demostró interés por el mundo del espectáculo, por eso a los 6 años ingresó en la escuela de baile de una de sus tías, donde Mayo comenzó a tomar clases de canto y de baile. Una vez que terminó la escuela en 1937 se convirtió en intérprete de una compañía de variedades, donde le aconsejaron cambiarse el nombre por el de Virginia Mayo. A una de las representaciones acudió un cazatalentos de Metro Goldwyn Mayer, que la ofreció una audición. El propio Samuel Goldwyn, máximo ejecutivo de la compañía, quedó deslumbrado por su enorme talento, y le ofreció un contrato.


Virginia Mayo fue una de las grandes estrellas de Metro Goldwyn Mayer
No obstante, cuando uno de los directores del estudio le realizó pruebas de filmación, manifestó que Mayo no era una actriz adecuada para el cine. Goldwyn sí creyó en ella, sobre todo en sus dotes de interpretación, y le dio un pequeño papel en la película “Jack London” (1943) de Alfred Santell. El mismo año participó en otra película, y los productores se dieron cuenta de su atractivo físico, que justificaba papeles más importantes. 
Michael O ‘Sea y Virginia Mayo en "Jack London"
Así, en 1944 ya tuvo su primer papel protagonista en "La princesa y el pirata" de David Butler, comedia musical en la que compartía cartel con el humorista Bob Hope. Para toda una generación de españoles esta película fue todo un hito, porque fue el film que se emitió durante toda la noche del 23-F. 
Bob Hope y Virginia Mayo en "La princesa y el pirata"
Con posterioridad su carrera obtuvo más éxito al lado de Danny Kaye, colaborando con el cómico en cuatro ocasiones más: "Un Hombre Fenómeno" (1945), "El Asombro De Brooklyn" (1946), "La vida Secreta de Walter Mitty" (1947) y "Nace una canción" (1948), remake en clave musical que Howard Hawks, realizó de la comedia "Bola De Fuego".
Virginia Mayo y Danny Kaye
También en los años 40 participó en las joyas siguientes "Los Mejores Años De Nuestra Vida" (1946) de William Wyler, o en ese magistral cine negro en clave western llamado "Juntos Hasta La Muerte" (1949) de Raoul Walsh, remake en tono de western del “film noir” “El último refugio” (1941), director con el que repitió en la obra maestra del cine negro "Al Rojo Vivo" (1949), donde compartía protagonismo con un magnífico James Cagney.

Virginia Mayo en "Juntos hasta la muerte"
James Cagney y Virginia Mayo en el noir "Al rojo vivo"
Este mismo año protagonizaría una comedia “The Girl from Jones Beach” (1949), tan real como su propia vida, donde interpretaba a una mujer que buscaba ser apreciada por su talento, antes que por su belleza, aunque como es de suponer por el título tiene oportunidad de lucir su escultural cuerpo en preciosos trajes de baño, en contradicción a su afán de ser reconocida por sus capacidades interpretativas. 

Virginia Mayo una de las actrices más hermosas del cine clásico

Virginia Mayo tribute
En su primera película conocería al gran amor de su vida el actor Michael O ‘Sea con el que se casaría en el año 1947. Mayo estuvo casada entre 1947 y 1973, año en que su marido falleció. Tuvieron una hija de este matrimonio.

Michael O ‘Sea y Virginia Mayo con su hija 
En la siguiente década Virginia Mayo intervino en grandes películas acompañada siempre de los mejores actores, como: Clint Walker, James Cagney, Robert Stack, Robert Ryan, Joel McCrea, Randolph Scott, Burt Lancaster, Kirk Douglas, Alan Ladd, Paul Newman, y Gregory Peck, y su popularidad fue creciendo con cada film en el que intervino, apuntalando su sensual imagen pese a su leve estrabismo. 
Virginia Mayo en una sensual imagen 
Gustaba mucho a los espectadores no solamente por su belleza, sino además por su simpatía y naturalidad. En esta década participó en las dos mejores películas de aventuras de todos los tiempos acompañando a los héroes Burt Lancaster y Gregory Peck en “El halcón y la flecha” (1950) de Jacques Tourneur y “El hidalgo de los mares” (1951) de Raoul Walsh además de uno de los mejores westerns filmados por el maestro Walsh con la participación de Kirk Douglas en “Camino de la horca” (1951). 


Virginia Mayo fue la compañera perfecta de nuestros héroes
Los títulos más recomendables de Virginia en este decenio (muchos de ellos de aventuras y del Oeste) son: las comedias musicales “The West Point Story” (1950) con James Cagney y Doris Day y “Starlift” (1951) con Doris Day y Gordon MacRae, "La novia de acero" (1952) con Alan Ladd, un western rodado en 3D llamado “Noche salvaje” (1953) con Dale Robertson, "El Talismán" (1954) con Rex Harrison, "Una Pistola Al Amanecer" (1956) con Robert Stack y "Westbound" (1959) con Randolph Scott, trabajando con directores de prestigio como Budd Boetticher, Raoul Walsh y Gordon Douglas. 
Alan Ladd con el cual coincidió en dos excelentes westerns dijo de él en una entrevista: “Alan Ladd con quién trabaje en dos ocasiones, junto con Gregory Peck, son mis coestrellas favoritas. Ladd era una bella persona, gentil y con carisma. Considero que fue mi mejor compañero de reparto con el cual trabaje encabezando una película”.
Gran química tenía con el actor Alan Ladd 
La actriz de Missouri trabajó intensamente hasta finales de los años 50, época a partir de la cual hizo menos películas y todas de serie B, un total de ocho en veinte años. A finales de los 50, Virginia Mayo se retiró casi por completo del cine, aunque a veces regresaba para hacer pequeños papeles en westerns de serie B como: “La furia de los jóvenes” (1965) y “Fort Utah” (1967). En los 80 aparecía en televisión, en las series “Santa Bárbara” y “Se ha escrito un crimen”. Y en los 90, aún aceptaba pequeños papeles como la película inédita en España llamada “The Man Next Door” (1997), que fue a la postre su último trabajo.
Virginia Mayo con Clint Walker en el western "Quince balas"
Falleció a los 84 años de edad, tras una larga neumonía que acabó en un paro cardíaco, en una residencia de Los Ángeles, después de rodar más de cuarenta títulos.
Preciosa lápida de su tumba 
Virginia Mayo participó en más de diez westerns a lo largo de su carrera, siendo una de las actrices con mayor número de papeles protagonistas en “el género por excelencia”.
1. Juntos hasta la muerte (1949) de Raoul Walsh 

2. Camino de la horca (1951) de Raoul Walsh

3. La novia de acero (1952) de Gordon Douglas 

4. Noche salvaje (1953) de Alfred L. Werker 

5. Una pistola al amanecer (1956) de Jacques Tourneur 

6. Tierra de violencia (1956) de Robert D. Webb

7. Valle prohibido (1957) de Thomas Carr 

8. Grandes horizontes (1957) de Gordon Douglas

9. Quince balas (1958) de Gordon Douglas 

10. Nacida en el oeste (1959) de Butt Boetticher 

11. La furia de los jóvenes (1965) de Christian Nyby

12. Fort Utah (1967) de Lesley Selander

Espero que os haya gustado la biografía de la vaquera más grande del salvaje oeste.