Podemos decir que en las Metamorfosis de Ovidio los dioses pasan el tiempo queriendo atrapar a mujeres que no están de acuerdo con lo que ellos quieren conseguir por la fuerza. Es fácil para los que son dioses. Y cuando ellas se quedan embarazadas, encima las mujeres de los dioses se vengan de ellas. La condición femenina, su abecé. Siempre culpables de lo que nos hacen. Criaturas responsables del deseo que suscitan. La violación es un programa político preciso: esqueleto del Capitalismo, es la representación cruda y directa del ejercicio del poder. Designa un dominador y organiza las reglas del juego para que le permita ejercer su poder sin restricción.*Sinceramente, los hombres ignoran hasta qué punto el dispositivo de emasculación de las chicas es imparable, hasta qué punto todo está organizado escrupulosamente para garantizar que ellos triunfen sin arriesgar demasiado cuando atacan a las mujeres.*Siempre que no lleve su nombre, la agresión pierde su especificidad, puede confundirse con otras agresiones, como que te asalten, dejarse arrestar o que te den una paliza. Esta estrategia de la miopía tiene su utilidad. Porque desde el momento en que se llama violación a una violación, todo el dispositivo de vigilancia de las mujeres se pone en marcha: ¿quieres que esto se sepa? ¿Quieres que todo el mundo te vea como una mujer a la que le ha ocurrido esto? Virginie Despentes, King KongThéorie (Traducción del francés de C. H.).