VISIONADOS EN BREVE XXIX: Crawl, Legado en los huesos, Los miserables, La maldición

Publicado el 17 enero 2020 por Dentro Del Monolito @dentromonolito
CRAWL (INFIERNO BAJO EL AGUA - Alexandre Aja, 2019)
El retorno de Alexandre Aja al cine de criaturas después de su Piraña 3D viene de la mano de Crawl (Infierno bajo el agua), cinta que mezcla dos aspectos muy explotados en el cine de terror: la reclusión claustrofóbica de los personajes en un espacio reducido, y la amenaza constante de un animal salvaje, en este caso en forma de cocodrilos mortíferos. El director sale airoso del envite, sabiendo manejar la tensión al modo de las películas clásicas de catástrofes. Aunque el presupuesto no debió ser demasiado holgado, Aja consigue recrear un huracán con bastante credibilidad, convirtiendo el set de rodaje en todo un escenario apocalíptico. La película también se beneficia de la intensa y física interpretación de la actriz Kaya Scodelario.
Infierno bajo el agua funciona como un reloj tanto en las secuencias en el interior de la casa como en las externas, y aunque no pasa de ser un mero entretenimiento para tardes ociosas, podríamos decir que todo lo que hace la película lo hace bien.
LEGADO EN LOS HUESOS (Fernando González Molina, 2019)
La secuela de El guardián invisible continúa con las andanzas de la inspectora Amaia Salazar en lo que es la segunda parte de la trilogía literaria propuesta por Dolores Redondo. Fernando González Molina repite como director, y de nuevo tenemos una correcta ambientación que se beneficia de las espectaculares localizaciones que despliega el Valle del Baztán donde se rodó la película (aunque resulta menos vistosa que su predecesora, eso sí). Lo que más me ha sorprendido es cómo el componente de thriller se va inclinando poco a poco hacia el terror, convirtiéndola en un producto bastante disfrutable que, al menos, compensa el precio de la entrada. Pese a las distintas adiciones al reparto, Marta Etura sigue siendo la más convincente del elenco.
LOS MISERABLES (Ladj Ly, 2019)El director y guionista francés Ladj Ly plantea en Los miserables una moderna tragedia griega enfocada en las interioridades de un deprimido suburbio parisino, el mismo en el que Ly vivió. Asistimos a una serie de luchas intestinas entre diferentes comunidades o guetos y la pequeña brigada policía que patrulla las calles durante el día. A través de una serie de personajes que ostentan parcelas de poder y un desarrollo en el que poco a poco se despliega el conflicto, el director logra disponer un incremento de la tensión que está perfectamente medido, y que termina desembocando en un explosivo desenlace. Me parece una propuesta que agarra al espectador y no lo suelta hasta el final, y que cuenta con uno de los mejores finales que han podido verse en el año. Fantástico ejemplo de ficción anclada a la realidad con un marcadísimo trasfondo social. Muy buena.
LA MALDICIÓN (Nicolas Pesce, 2020)Tenía muchísimas ganas de comprobar lo que Nicolas Pesce era capaz de hacer con una franquicia tan dispersa como La Maldición (The Grudge). Una vez vista, el veredicto solo puede ser uno: profunda decepción. Y es que no hay en La Maldición rastro alguno del talento mostrado por Pesce en The eyes of my mother o Piercing, quedando todo reducido a una sucesión de clichés del género que no aportan nada. Lo único salvable es su estructura de mezcla de líneas temporales, que se presenta interesante pero muy desaprovechada al final. Cada vez que el estilo del director intenta aparecer, la película lo entierra bajo la habitual serie de efectismos baratos, dejando como impresión principal nada más que lo típico de una producción de estudio sin personalidad. Una lástima.