El pasado domingo, tuve la fortuna de visitar la Casa Ronald McDonald de Madrid y, como digo en mi cuenta de Instagram, creo que aún me dura la sonrisa en la cara :)
La Casa de Madrid es una preciosidad, grande, llena de luz y color, con una amplia cocina, varios patios estupendos, gimnasio, cuarto de juegos -casi un parque de bolas-... ¡un dulce, vamos!.
Pero lo más importante y valioso que tiene la Casa son, por supuesto, sus voluntarios y las familias y peques que viven en ella. Desde aquí, quiero dar las gracias a Ana y Claudia por ayudarme a hacer realidad esta visita, a Gigi por su compañía y a las mamis y papis que se acercaron a mi mesa para pintarse o pintar a los peques.
Por supuesto, gracias a los superhéroes que pasaron por mis pinceles: todos los son, las princesas, los hombre arañas, las flores, las mariposas... todos son súper y todos son héroes.
Nunca olvidaré ese ratito tan intenso y especial, sus sonrisas, sus miradas de ilusión y sus manos enganchadas en las mías mientras les coloreaba la cara. Qué suerte poder darles un poquito de felicidad con algo tan sencillo y que tanto me gusta. Soy muy afortunada.
Aquí os dejo algunas fotos de mi visita, pero no os perdáis la noticia en la web de la Casa Ronald McDonald de Madrid, las fotos que la ilustran son chulísimas :D (pasadlas pinchando en la flecha que hay a la derecha de la imagen) (Enlace a la web de la Casa Ronald McDonald de Madrid)