30 abril, 2013
Malta
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Hace unos días encontré por casualidad un foro de coleccionistas de clicks de playmobil. Es increible el interés que despiertan estos juguetes, que para muchos han pasado a ser objetos de culto. Pasé un buen rato curioseando el foro, entre fotos de colecciones y escenografías realizadas con las diferentes versiones de los famosos clicks: el barco pirata, el lejano Oeste, la escuela, el mundo medieval… ¡de locura! Recordé entonces que aquí en Malta se encuentra la fábrica de Playmobil, y que hace unos meses estuve por allí haciendo una visita, más por curiosidad que por interés personal.
Se encuentra a unos cinco km del aeropuerto y unos ocho de la capital, en un polígono industrial en Hal Far. Las indicaciones para llegar eran claras, ya que el X4 decían que paraba justo en la puerta. Nosotras, desde Bugibba tomamos el X3 al aeropuerto y desde allí, el X4 hasta llegar a Hal Far, pero por más que buscábamos el edificio de Playmobil para bajarnos del autobús, nunca lo vimos. Cuando ya nos parecía que estábamos por la zona preguntamos al conductor y resulta que estaba la carretera en obras y no pasaba por allí (OMG… This is Malta!), así que nos dijo que nos bajásemos y retrocediésemos unos metros para luego tomar una calle a la izquierda.
Finalmente llegamos al Playmobil FunPark. La entrada al recinto es gratuita, lo único que se paga es la visita guiada a la fábrica. La entrada simula las puertas de un castillo y el interior ambientado con personajes de Playmobil en tamaño gigante.
Las visitas a la fábrica tienen un horario estipulado, así que conviene informarse primero para no tener que estar mucho rato esperando. Nosotras nos fuimos antes porque no había mucho que hacer por allí y la siguiente visita era ya muy tarde. Con niños supongo es diferente porque pueden entretener jugando con todos los muñecos que hay en la sala.
Al fondo hay una cafetería y cerca de allí la tienda, donde venden los típicos Caballeros de Malta, como no podía ser menos.En la zona exterior hay un parque de juegos con casitas, establos y demás figuras, junto a la terraza de la cafetería.
En la web pone que el precio de entrada a la fábrica es de 1,20 € pero creo recordar que, cuando estuvimos, era bastante más y la entrada incluía un mini muñeco de regalo.El regreso fue todavía más complicado que la ida. Fuimos hasta la parada del autobús donde se supone que teníamos que coger el de vuelta hacia el aeropuerto pero como la calle estaba en obras, por allí no había circulación. Un cartel anunciaba que la parada no estaba en servicio, pero no decía la alternativa. Regresamos al Playmobil FunPark a preguntar, pero no nos supieron decir cómo localizar la parada más cercana en funcionamiento, así que nos ofrecieron reservar un taxi por 20 euros, propuesta que rechazamos.En la puerta estaba el conductor de un minibús turístico que nos ofreció llevarnos hasta la parada por 10 euros… y estábamos a punto de decir que sí cuando escuchamos hablar español a una pareja que entraba en un coche, así que hablamos con ellos y les explicamos lo que ocurría, ofreciéndose amablemente a llevarnos hasta una parada de autobús, aunque ellos iban hacia otro lado. En resumen, una visita interesante si acudes con niños o eres coleccionista, pero prescindible en mi opinión para el resto de los casos. Pero si no quieres irte de Malta sin una foto con un Playmobil, puedes aprovechar el que está en la tienda Playmobil del aeropuerto, igual que los del Playmobil FunPark en tamaño gigante.
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