Visitamos el MUPE: El Museo Paleontológico de Elche (Alicante)

Por Ninosenmochila @ninosenmochila

La mascota del MUPE

El pasado viernes me enteré, a través de la página de facebook de Visit Elche, de que la entrada al MUPE es gratuita los domingos. El MUPE es el Museo Paleontológico de Elche. Ya hace tiempo que queríamos visitarlo ya que en casa somos fans de los dinosaurios, nos encanta ver huesos, reproducciones y fósiles, y ya que este pasado domingo hacía sol y tenía a los tres niños buenos aprovechamos para conocerlo.
El MUPE es un pequeño museo distribuido en dos plantas dónde se exhiben unos 1.000 fosiles (de los más de 60.000 ejemplares que posee el museo) además de una importante colección mineralógica. Entre sus piezas relevantes se encuentran uno de los ámbares más antiguos de toda Europa, los restos del puercoespín más antiguo conocido o un excepcional mosasaurio original de Marruecos de 5 metros de longitud (un gran lagarto acuático del que no tengo foto porque me salió borrosa. )

Como se trabaja en un yacimiento


Elche está bastante cerca de casa, así que no tuvimos que madrugar mucho y sobre las 11:30 estábamos aparcando muy cerca de la plaza de Sant Joan, donde está dicho museo. Tuvimos una suerte... Como os he contado antes la entrada era gratuita por ser domingo. No dejaban de llegar familias con peques. Si vais cualquier otro día de la semana la entrada general cuesta 2€ y para estudiantes, grupos, carnet jove, jubilados y familias numerosas tan solo 1€. Los niños menores de 6 años, personas con tarjeta dorada del Ayuntamiento de Elche, profesores y monitores acreditados y personas discapacitadas y/o con movilidad reducida no pagan. El horario de visitas de martes a sábados es de 10 a 14h. y de 15 a 18h. Los domingos solo por la mañana. Lunes cerrado.

Había unos Trilobites enormes


Nada más entrar, al ver que llevábamos el carro con Cesar, el chico que estaba atendiendo a los visitantes nos dijo que el ascensor se había estropeado y se ofreció muy amablemente a ayudarnos si queríamos subir el carro a la planta de arriba. A nosotros no nos hizo falta ya que decidimos que subiríamos en dos turnos para no despertar al peque que dormía. De todas formas llevaba la bandolera por si en algún momento tengo que portearlo. 
Lo primero que encontramos al entrar es una pequeña proyección sobre el origen de la vida. Tras visionarla accedemos a la primera zona del museo: El Paleozoico. En ella se exponen fosiles de invertebrados y pequeños vertebrados marinos: esponjas, corales, moluscos, trilobites... incluso restos de uno de los primeros anfibios conocidos.

Este es el anfibio


En la siguiente sala, correspondiente al Mesozoico, observamos restos de la Era de los Dinosaurios. Hay unas reproducciones de los esqueletos de varios dinosaurios que hacen las delicias de los peques. Todos se hacían fotos (sin flash, claro) y también todos querían comparar su altura con la pierna de un braquiosaurio pintado en la pared. Hasta hacían cola para esperar su turno...

La Era  Mesozoica está representada por los restos de algunos animales (como un armadillo o la enooorme mandíbula de un gigante marino ) y por restos humanos. Hay diferentes cráneos de seres humanos prehistóricos que a la pequeña Carla (3 años) le hacían mucha gracia. - Vamos a ver los monstruos - decía.
En su sala de exposiciones temporales, situada también en la planta baja, actualmente podemos ver una gran colección de minerales.

En la planta superior también hay restos de las distintas épocas pero la exposición se centra en restos encontrados dentro de la provincia. A mí me sorprendió enoormemente ver parte de la mandíbula inferior, con cuerno y todo, de un mastodonte encontrado en Crevillente (un animal de una familia muy, muy lejana a la de los elefantes). En cambio a Marco (8 años) lo que más le sorprendió fueron las enormes Ammonites encontradas en Elche. Se le escapo un - Aaaalaaaa! - que se oyó por toda la planta. Decía que nunca había visto una tan grande.

Ammonite


Solo una pega, que en los baños, muy amplios y limpios por cierto, no había cambiador para bebés. He de deciros que les he hecho esta sugerencia al museo y me han comunicado que la tomarán en consideración al tiempo que me lo han agradecido. 
Total, que pasamos una mañana muy agradable y divertida al tiempo que aprendíamos algo de paleontología en familia. Como de vez en cuando realizan talleres y actividades enfocadas a los peques, seguro que volvemos. Tendremos que probarlas ¿no?
Si queréis ver más fotos, os las he dejado aquí.