Un estudio realizado por el Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (CREAL), concluye que es necesario que las futuras mamás tengan un buen nivel en su organismo de vitamina D para mejorar el desarrollo cerebral del feto. Un nivel reducido de esta vitamina se asocia a un desarrollo cerebral más lento y por consiguiente, a unas habilidades motoras y mentales más deficientes.
La verdad es que estas conclusiones no nos sorprenden, recordemos el estudio en el que se concluía que la falta de vitamina D en el embarazo se asociaba a problemas de habla en los niños. Cada vez son más los estudios que muestran el valor que tiene esta vitamina para el desarrollo fetal y la futura vida del bebé. Sabemos que la vitamina D también denominada antirraquítica, es muy importante para la formación y mineralización de huesos, está implicada en la regulación del fósforo, promueve la actividad antitumoral, y así un largo etcétera. Es una vitamina valiosa y muy importante que actúa desde el inicio de la formación del feto, su deficiencia conlleva todo tipo de problemas en niños y adultos, por lo que es lógico deducir que su carencia afecta al bebé que se está formando.
Para llegar a la asociación entre vitamina D y desarrollo cerebral del feto, los especialistas realizaron un estudio con 1.820 mujeres embarazadas y sus hijos en un periodo comprendido entre el año 2003 y el año 2008, parece ser que se determinó una correlación entre los niveles de vitamina D en el organismo de la madre y el desarrollo neuropsicológico infantil. Los investigadores utilizaron técnicas como la cromatografía de líquidos durante las semanas del embarazo para determinar los niveles de vitamina D, concretamente se realizó un examen de 25 hidroxi-vitamina D3 durante el primer trimestre del embarazo, una de las formas más precisas para medir este elemento en el organismo.
En el artículo de Nutraingredients leemos que cuanto más aceptable era el nivel de vitamina D, mejor era el desarrollo mental y psicomotor de los bebés. Los resultados de los análisis mostraron que el 20% de las mujeres que tenían deficiencia de esta vitamina y un 32% tenían un nivel insuficiente. En las pruebas realizadas a los bebés, la diferencia entre estos y los bebés de un grupo de madres con un nivel de vitamina D adecuado eran significativos. En las pruebas mentales y psicomotrices que se realizaron a los 14 meses de edad, los bebés de madres con deficiencia en la vitamina obtuvieron 2.6 y 2.3 puntos menos respectivamente, en comparación con los bebés del segundo grupo (niveles aceptables).
Con un nivel adecuado de vitamina D se puede garantizar que los niños tendrán un cociente intelectual aceptable e incluso superior a la media, por tanto, es recomendable mantener unos niveles adecuados de la vitamina durante el embarazo, pero no hay que tomar suplementos por cuenta propia y debe realizarse un seguimiento por parte de los especialistas médicos. Puedes conocer más detalles del estudio a través del artículo publicado en la revista digital Pediatrics.
Foto | Daia
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Vitamina D para mejorar el desarrollo cerebral del feto