Esta Constitución estuvo vigente únicamente dos años, hasta que la vuelta de Fernando VII trajo a España de nuevo el absolutismo, pero sirvió a Portugal y otros países del entorno como modelo para redactar sus propios textos constitucionales. Por el día en que fue proclamada, fue llamada "La Pepa", y de ahí la conocida expresión "¡Viva la Pepa!" que se empleaba por los liberales para reivindicar los derechos y libertados que la misma propugnaba. También se popularizó otra expresión, "¡Trágala!", dedicada a Fernando VII que tuvo que jurar lealtad a España sobre ella.
Texto de la Constitución de 1812