Las letras, una moda que se ha extendido a lo largo del país y que servían para que los turistas pudieran presumir de visitar algún destino, fueron retiradas porque se consideró que entorpecían el paso de las personas. Sin embargo, muchas veces se refirió a que la verdadera razón era un trasfondo político.
Las letras habían sido instaladas en la administración de Ricardo Gallardo Juárez, y tienen unas dimensiones de 1.25 metros de alto, 90 centímetros de ancho y 40 centímetros de profundidad.
Hay que recordar que otro de los ornamentos que sufrieron el embate de la administración navista fue la desaparición de un vitral que fue colocado al interior del Palacio Cultural Municipal.