Volverás a Alaska, Kristin Hannah
Publicado el 18 enero 2019 por Pasajesromantic
Después de casi veinte días del comienzo de año reaparezco por el blog. Esta vez no ha sido por la apatía, una operación me ha tenido prácticamente en cama desde principios de diciembre. Nada grave, pero la recuperación es bastante lenta. Los reyes me dejaron bien surtida para este reposo obligatorio (ya lo enseñaré en otra entrada) pero también me he pillado algún libro que me apetecía mucho tener.Uno es este, el único libro que me faltaba de la autora, una imprescindible para mí.
La historia comienza en 1974. La familia de los Allbright, Cora, Ernt y su hija Leni, van a dar un cambio radical a su vida. Tras la guerra de Vietnan Ernt no es el mismo. Tiene pesadillas, mal humor y ha perdido la alegría de vivir. Pero todo cambia cuando recibe una carta: Ha heredado una propiedad en Alaska. Ernt comienza a soñar con una vida nueva, una vida en la que olvidar el pasado y asentarse, en la que echar raíces. Tras un largo viaje, dejando atrás la civilización, llegan a un pequeño pueblo remoto de Alaska, Kaneq. Allí, en medio de las montañas, está su nuevo hogar. La familia tendrá que dejar atrás comodidades como el agua corriente y la electricidad, todo un cambio. Lo primero que destaca del entorno es la amabilidad y solidaridad de los vecinos del pueblo. Todos aceptan y acogen a la familia desde el primer momento. Mujeres y hombres los ayudan a adaptarse, a construir superficies para guardar la comida, para proteger a sus animales y huertos de los osos y los lobos. Les enseñan a protegerse, a tomar precauciones y sobre todo a temer al largo invierno que cubre Alaska durante, a veces, seis meses al año. Un invierno duro, crudo, que sume en la oscuridad todo, incluso el corazón de muchas personas. La historia transcurre a lo largo de doce años en los que la familia pasará por muchas etapas. Leni y su madre Cora son las principales protagonistas de la historia. Mujeres que han tenido que hacerse fuerte a golpes, que han tenido que aprender a sobrevivir y luchar contra las adversidades. Aunque el peligro esté dentro de su propia casa, de su propia familia. Volverás a Alaska es una historia muy dura, como todas las de la autora. Pese a ello se disfruta de principio a fin. La autora tiene una manera de narrar la vida en Alaska que engancha, la ambientación es sublime, cada detalle está retratado. Hannah nos sumerge en las costumbres, las fiestas, las leyendas… todo lo que hace peculiar a Alaska. Las auroras boreales, los meses sin luz, el frío infernal, los osos y lobos salvajes acechando continuamente. Las muertes…y es que cada año desaparecen personas sin dejar rastro. Y es que Alaska puede matarte o puede salvarte. Me queda mucho por contar, pero como digo en todas las novelas que me hacen sentir tantísimo, es mejor que el lector lo descubra por sí mismo. En Volverás a Alaska el lector vivirá un montón de situaciones y emociones a la vez que los protagonistas. El amor tóxico, este que mata y destruye todo a su paso, las secuelas que la guerra deja en las personas, el temor al futuro, el miedo intenso…pero también el amor verdadero, ese que perdura a pesar de la distancia y los años. La fuerza de dos mujeres, madre e hija, capaces de luchar contra viento y marea por su felicidad. Volverás a Alaska es un canto a las segundas oportunidades, a la fuerza que mueve el mundo, al amor y en definitiva a la vida. Todo envuelto con una ambientación maravillosa y una narración, como siempre, mágica.