Vox alimentó la tensión y las protestas contra las restricciones y culpa a la izquierda de los disturbios.

Protesta en Madrid este sábado por las restricciones de movilidad.Cargas policiales en León tras protestas por el toque de queda. La ultraderecha siembra el caos en Barcelona. 

“¡Qué paradójico: los seguidores de Franco y Hitler clamando por la libertad!”, se denuncia en las redes. El partido de ultraderecha llevó toda la semana pasada lanzando mensajes contrarios a las restricciones de movilidad y terminó apoyando las manifestaciones de este fin de semana registradas en distintos puntos de España. Algunos de sus líderes más destacados de la extrema derecha, alimentaron la tensión y apoyaron manifestaciones y marchas que terminaron con detenidos, heridos y disturbios durante este fin de semana. A través de su cuenta de Twitter, Santiago Abascal, presidente del partido, mostró su apoyo a las protestas y pidió a la Policía protección a los manifestantes. “Pido a la Policía que proteja el derecho de manifestación”, aseguró en su cuenta de Twitter. “Y pido [a la Policía] que identifique y detenga a la extrema izquierda, los menas e infiltrados que están provocando disturbios y saqueos”.

Los peores incidentes se registraron en León, pero Madrid, Logroño, Málaga, las tres capitales vascas, Santander y Barcelona fueron escenarios de tensión entre manifestantes y policías, que han dejado en total 60 detenidos y once agentes heridos durante todo el fin de semana. En zonas como Vitoria o en la Ciudad Condal, las protestas fueron acompañadas de quema de contenedores, rotura de escaparates y saqueo de comercios, acciones que provocaron la intervención de equipos de antidisturbios. Abascal, así como los líderes y cuentas oficiales de Vox quiso culpar a la izquierda de los disturbios generados en las manifestaciones. Sin embargo, la izquierda se mantuvo al margen de todas ellas.

Los administradores de la red social Twitter decidieron bloquear la cuenta de Bertrand Ndongo, asesor de Vox más conocido como “el negro de Vox”, por incitar al odio y difundir bulos. En su instagram personal y en otra cuenta de Twitter, el propio Ndongo confirmó esta suspensión que, a su juicio, tenía como “único objetivo, callar a Vox”, aunque insistió en que “no lo van a conseguir”. El último tuit publicado por Ndongo era una fotografía en la que se veía a tres jóvenes vestidos de Lacoste con el comentario: “Toca lucir Lacoste”. Hacía referencia a los saqueos sucedidos en la noche del sábado en Logroño, donde una tienda Lacoste fue asaltada.

Desde diferentes cuentas del partido, se apostó por la estrategia de desacreditar el confinamiento, presentado como una fórmula disfuncional para evitar contagios y, posteriormente, defender las manifestaciones contra estas restricciones. Desde la cuenta de Vox en Álava, se puso en duda la cualificación de los expertos y uno de sus portavoces en el Congreso de los Diputados, Ignacio Garriga, también quiso defender a los manifestantes en su cuenta de Twitter, que acompañaba imágenes de los altercados. Sin embargo, la izquierda se mantuvo al margen de todas estas protestas.

Según La Última Hora, tras la segunda noche de graves altercados, los medios de comunicación vinculados con ciertos poderes mediáticos intentaron blanquear la cara a grupos fascistas organizados. Estos medios intentaron culpabilizar de los destrozos y saqueos a menas, migrantes y supuestos grupos de extrema izquierda. El Telediario de TVE recogía los disturbios mostrando a “jóvenes de extrema derecha y de extrema izquierda”, en una suerte de falso reparto de culpas. Sin embargo, las imágenes recogidas en las violentas manifestaciones y varios tuits de VOX La Rioja, alentando y justificando la violencia, no dejaban lugar a dudas.