Me encantan los juegos de Donkey Kong, absolutamente todos, desde aquel mítico arcade que puso al señor Miyamoto en portada de todas las revistas del sector, hasta este último Tropical Freeze. Hablando del arcade os puedo asegurar que me habré dejado un millón de monedas en aquel mueble (quizás exagero, pero prometo que al menos fueron medio millón, lo juro) me llegué a conocer muchas de sus pautas y le di algunas vueltas a sus cuatro pantallas con sólo 25 pts. No creí que esta saga pudiera dar juego mejor, y aunque se intentó con juegos notables el tiempo me fue dando la razón...hasta que llegó Rare.
Rare amigos mios, que suerte he tenido de ser contemporáneo de la Rareware que hacia magia con sus juegos, suerte de crecer y pasar mi adolescencia con la Rare que brillaba, la que era admirada y respetada, la que para mi -con permiso de Sega- es la única que ha sabido bailarle a Nintendo en su propio teatro, el teatro de la fantasía y poner a todo el respetable en pie, esa Rare es de la que os hablo.
Donkey Kong Country fue un juego soberbio, con unas melodías que todavía soy incapaz de dejar de tararear, un impresionante diseño de niveles, una dificultad digna de la época y un apartado gráfico que dejo en vergüenza todo lo que se había echo antes de él. Al éxito de esta primera entrega le siguieron dos más y una versión 3D para la Nintendo 64, todos juegos sobresalientes aunque en mi opinión ninguno llegó a superar al primero.
Tiempo después paso lo que ya no se puede evitar, Rare se fue apagando hasta tal punto que su talento solo vive en el recuerdo de los que tuvimos la fortuna de conocerla. La saga Donkey Kong Country se queda en Stand By y le toca a una nueva compañía "lidiar" con la más guapa.
Porque no lo tenía fácil Retro Studios, es cierto que no se podía tener mejor carta de presentación, ya habían demostrado con Metroid de lo que eran capaces, pero cuando se pusieron manos a la obra con aquel Donkey Kong Country Returns tenían dos problemas directos, sacar adelante un buen juego, y aguantar las comparaciones con Rare.
¿Lo consiguieron? lo primero indudablemente sí, Retro Studios tiene un enorme talento y las dos entregas de Donkey Kong Country son dos juegos sobresalientes, especialmente el segundo que mejora en absolutamente todo al primero, mención especial al control que ahora es una delicia.
Pero vamos al tema controvertido, ¿son mejores las entregas de Retro Studio que las de Rare? Esto es una opinión personal pero MI respuesta es NO.
No, porque Rare consiguió llegar al techó gráfico de snes y no solo eso, también consiguió asombrar a toda la generación de 16 bits, desgraciadamente Retro Studios juega con la limitación de dos consolas inferiores técnicamente a la competencia con lo cual tiene muy difícil asombrar por sus gráficos, aún con esta limitación tampoco creo que ninguno de sus Donkey Kong sean el techo gráfico de sus respectivas consolas.
No, porque las melodías que sigo tarareando a día de hoy son las de Rare.
No, porque prefiero jugar con Didi Kong que llevarlo en la espalda.
No, porque echo de menos a Enguarde, Winky, Squawks o Expresso entre otros animales que ayudaban a Donkey Kong en sus primeras aventuras.
Y por último No, porque prefiero enfrentarme a cocodrilos que a pingüinos u objetos musicales poseídos.
Ya veis que me gusta mojarme, nada de dar empates para ser un bien queda, lo siento pero a mi me gustan más los juegos de Rare, especialmente el primero. Significa esto qué las dos versiones de Retro Studios son malas, en absoluto son dos juegos impresionantes y me alegro que haya caído en tan buenas manos, a día de hoy tengo mi confianza total en esta compañía y creo que con el tiempo todavía conseguirán tener más respeto del que ya de por si se han ganado, quizás en un futuro hasta consiguen superar la trayectoria de Rareware. Brindo por ello.