Un año después podemos decir que lo ha conseguido, con motivo de una celebración especial hemos vuelto y no nos ha defraudado.
Esta vez había en el menú rollito de queso bree con jamón ibérico (fabuloso) o cangrejo en tempura con pisto a elegir, merluza sobre crema de brócoli, alioli y taco de cochinillo y de postre se podía elegir entre capuccino de fresas con nata y torrija caramelizada. Eso sí, han subido el precio y de 20 euros han pasado a 24, y es que el éxito siempre se paga.
El servicio perfecto, de hecho, una de las comensales les pidió un postre de chocolate fuera del menú y se lo pusieron. En fin, así da gusto.
De broche final, el postre