Esta semana vais a descansar de series porque seguro que estáis muy atareados con todas las nuevas temporadas. “The Walking Dead”, “Homeland”, “American Horror Story: Freakshow”, “The Originals” y siguiendo todavía alguna como “Sons Of Anarchy” o “Boardwalk Empire”. ¿Quién no acaba saturado? ¡No tenemos tiempo para tantas buenas series!
Esta noche me voy a centrar en un musical que he ido a ver este fin de semana, pero seguro que más de uno lo habrá visto ya y lo habréis disfrutado como si fuerais niños pequeños. ¿Me estoy equivocando? ¿Sabéis de cuál os hablo? “El Rey León” es el musical que “conmueve al mundo”.
¡Y qué gran razón tiene ese eslogan! ¿Cómo podría describir esta hombre maestra? Sensacional, vibrante, emocionante, espectacular, conmovedora, tierna, graciosa y espléndida. Esos serían los calificativos que me vendrían a la mente solo con recordar cada momento vivido, donde recordarás una de las películas que más ha marcado la infancia de todos los niños y que te ilusión ver representada en carne y hueso.
Un teatro tremendamente lleno, entradas agotadas como viene siendo habitual y unos actores que demuestran el gran talento que desprenden. Sensaciones a flor de piel al escuchar “El Ciclo de la Vida” viendo pasar a todos los animales camino al escenario y reconociendo a cada uno de los personajes de esa gran historia.
El musical tiene una duración más bien larga contando con un descanso entre acto y acto para que la gente pueda reponer fuerzas. Y ya de paso, dejar que los actores también descansen después del tremendo trabajo que hacen y poco a poco vas reviviendo la película subido en un escenario.
El guión siempre ha estado claro, la película siempre permanecerá en nuestro recuerdo, pero la banda sonora dota a este musical de dinamismo. Unido a los perfectos escenarios y decorado con la grandiosa interpretación de los actores. Algunos mejores que otros, algo que es normal en este mundillo, pero se nota que el trabajo conjunto a dado sus frutos y por eso repite en cartel una y otra vez.
El primer acto nos muestra la infancia de Simba, cómo tiene que ir aprendiendo poco a poco las responsabilidades de ser un futuro Rey enseñado por Mufasa y vemos conspirar a Scar desde las sombras para acabar con padre e hijo. Sin duda, el comienzo de la historia está inmortalizado por Rafiki que es interpretada por Zama Magudulela y que deja con la boca abierta ante tremenda voz.
La historia se complementa con David Comrie que actúa como Mufasa, pero sin dejarnos a Sergi Albert que interpreta a un perfecto Scar o a Esteban Oliver que encarna al siempre leal Zazu. Simba y Nalla siempre son cambiados cada poco tiempo, pero demuestran mucho talento desde tan jovencitos.
Sé que muchos habréis llorado con la muerte de Mufasa, más de uno lo recordará con gran dolor al verlo en la pantalla y os aseguro que verlo en el teatro te deja con un nudo en la garganta. Pero es algo necesario para que Simba desaparezca y se encuentre con sus inseparables amigos Pumba y Timón que en este caso tiene acento andaluz.
Tras el descanso, las luces vuelven a apagarse para crear la atmósfera perfecta que nos deriva a una canción pegadiza y nos muestra a los personajes muchísimos años después. Vemos el cambio de Simba interpretado por Michel Jáuregui, pero también la transformación de Nala encarnada por Daniela Pobega y disfrutamos con las bromas que hace Zazu al amargado Scar.
¿Quién no ha disfrutado con el Hakuna Matata? ¿Vives y dejas vivir? Todo es una sucesión de recuerdos de la infancia, donde los más pequeños disfrutan y también los más grandes para qué negarlo. Pero son miles de sentimientos los que te embargan cada vez que escuchar una canción, como ese “Él vive en ti” o la famosa “Es la noche del amor”. Sí, canciones estelares que han marcado miles de vidas y que lo siguen haciendo a través de estas funciones.
Un final espléndido que sin duda te deja con ganas de más, donde esperas una nueva escena que no se ha descubierto nunca y donde los aplausos no cesan en ningún momento. Cada escena del acto arranca un aplauso espontáneo y cuando todos los actores se presentan ante el público es el colapso general.
¿Recomendaría el musical de “El Rey León”? ¡Sin dudarlo! Creo que es una cita imprescindible para todo aquél que le encante esa película, donde verá dotada de vida una historia que le marcó desde la infancia y os aseguro que repetiría si las entradas no fueran tan tremendamente caras. Y aún así, solo puedo deciros que merece muchísimo la pena pagarla, solo por ver semejante espectáculo.