Pues si, me doy un +1 porque sumamos otra vuelta a esta pequeña estrella naranja de alienta la vida de este planeta. Ya son 48 las vueltas que llevo dadas, pero la vida sigue sorprendiéndome y el ser humano continua confundiéndome.
Ya miro de reojo a los 50, cualquier día se presentan aquí con certificado de medio siglo danzando por estos lares. No creáis, no preocupa ni me molesta cumplir años, todo lo contrario disfruto cada día con mi familia y las personas que se que me quieren y aprecian.
Y las arrugas, que las tengo, son en su mayoría de reír y de preocuparme, lo justo, por aquello que está bajo mi control. De este nuevo año solo espero salud para los que me rodean, de cerca y de lejos, en analógico y en digital, para disfrutar de cada momento de esta nueva vuelta que hoy comienzo.
Acepto regalos, prometo disfrutarlos, así que déjame uno en los comentarios. Y ... ama y ensancha el alma.