Por otro lado, Therese, la vampira que conoció cuando ésta fue a pedir trabajo de camarera en el restaurante de iAm y que es idéntica a su difunta shellan, vino a Caldwell alejándose de su familia ante el dolor de haber descubierto que era adoptada. La atracción que siente por Trez no es lo que necesita en esos momentos en que quiere labrarse un futuro en que pueda mantenerse en pie por sí misma. Y aun así, la sombra parece ser quien se le aparece en unos intensos sueños.ReseñaThe Shadows fue un libro que cabreó a mucha gente. Se saltó una de las reglas principales de la romántica adulta, esto es, la muerte de uno de los miembros de la pareja protagonista, y el resultado fue una indignación bastante desmesurada. Para mí, las reglas de un género no están escritas en piedra y el libro tuvo una intensidad y una emoción que compensaba esto. Era un libro duro pero también precioso.
El destino de Trez, teniendo que quedarse en el mundo sin Selena, era muy cruel y entiendo que la autora quisiera darle a la larga un final feliz. Pero a la larga. Vale que me estoy pegando una maratón bastante fuerte en poco tiempo con esta saga y que entre que se publicó aquel y éste han pasado varios años, pero este libro sigue llegando demasiado pronto. Más aún porque Therese ya apareció en realidad en The Chosen. Si es que cualquier cosa que viniera de ese libro no podía ser bueno...
Cabría la posibilidad de que la autora ya tuviese previsto este desarrollo cuando Selena murió, pero me temo que no es el caso. Este libro (bueno, digo éste pero sumo la parte de la trama que empezó en The Chosen) nace solamente para contentar al público que se cabreó con ella y así ha sido el resultado: parece un fanfic malo. Pero malo con avaricia.
Para empezar, como me temía, la solución para Therese es la misma que la Virgen Escribana dio a Darius, que lo "resucitó" como bebé retrocediendo en el tiempo de modo que Darius y John Matthew estuvieron vivos a la par varios años. Pero al menos, en su caso, al crecer y convertirse en John su aspecto no acabó siendo como Darius (salvo en sus ojos) y, además, cuando está cerca de alguien de su pasado (Beth, su hija que pasó a ser su "hermana" o Murhder como antiguo compañero y buen amigo) le dan convulsiones y pierde el conocimiento. Aquí, la jugada de Lassiter deja a Therese con el mismo aspecto que Selena y sin ninguna consecuencia.
Más cosas malas. Therese, por sí misma, es un horror de personaje. Lo de que quiere ser independiente puede estar bien pero lo es porque es una cría estúpida que descubrió que era adoptada y le dio la pataleta. No dejó que sus padres se explicaran, padres que le habían dado todo el amor del mundo, y dejó a su madre con la cara rota de dolor y sabiendo que encima la mujer estaba enferma del corazón. En definitiva, que nos tenemos que enamorar de una egoísta melodramática que huye de sus problemas a la primera de cambio. Pues menuda basura de sustituta de Selena.
Luego, su historia con Trez no vale dos duros. Él nunca la llega a amar por sí misma, nunca va a ser Therese aunque diga su nombre, siempre va a ser Selena. Para eso más valdría que la autora se hubiese sacado cualquier otro conejo de la chistera para resucitarla porque esto resulta bastante insultante y eso que ya habéis visto que no soy fan precisamente de Therese.
Ni siquiera puedo decir que tengan escenas memorables entre ambos. Ni de sexo, ni románticas. Un cúmulo de situaciones clichés, un desarrollo previsible, un poco de tensión al final que sabíamos que iba a llegar para justificar la reunión después de la pelea... Qué enorme truño.
Suma y sigue. Al menos este libro podría haber estado bien para resarcir un poco a iAm que en The Shadows apenas tuvo espacio para su historia. Este cuento tenía páginas suficientes para ello pero no es así. Hay un blablablá insoportable pero a él apenas le vemos en un par de escenas y descubrimos que Maichen está embarazada. De verdad que iAm se merecía más.
Oh, y como colofón a tanto desatino, un ridículo primer capítulo contado desde el punto de vista de un humano aleatorio que no aporta absolutamente nada. Cero. Es que, de verdad...
Algo bueno debe tener el libro, ¿no? Pues, sinceramente, el único momento que me gustó fue cuando Rhage y Mary se encuentran para cenar en el restaurante de iAm y vemos el amor de ambos a través de los ojos de Therese. Al menos esta pareja me sigue encandilando cada vez que aparecen. Y, bueno, la parte familiar de Therese reencontrándose con su familia y tal también me parece salvable aunque todo el drama que se da fuese consecuencia de su estupidez.
Este libro no debería existir. O, al menos, no así. Podría haber sido una historia de Trez conociendo a Therese como vampira idéntica en el exterior a Selena, pero que ahí acabase todo. Que se sintiese atraído por ella por esto pero que a partir de ahí entrase en su corazón por si misma. Nada de trucos de magia barata repetidos de mala manera (esperaba más de Lassiter como sustituto de la Virgen Escribana pero, de momento, entre lo que ha hecho aquí y lo que le hemos visto hacer en otros libros me está decepcionando). Un libro sobre la superación del amor perdido y el abrirte de nuevo. Y dado lo poco que sabemos de las sombras como subespecie, se podría haber sacado de la manga algún ritual/hechizo/algo para que Trez hablase con Selena en el Fade para obtener su bendición para salir con otra ¡Será por opciones! Creo que podría haber sido eso y habría sido precioso. Un poco lo que pasó con Tohr en Amante Renacido pero facilitando el primer paso entre ambos gracias al parecido exterior.
Pensaba que lo peor que iba a leer en esta saga iba a ser The Chosen y este libro lo ha superado. Como decía, es un fanfic malo escrito por alguien que no parece la autora de las joyas que anteriormente ha dado en esta serie. Un pastel ñoño, aburrido, con personajes mediocres y encima, previsible. Se ha cargado lo emotiva que fue la historia de Trez y Selena para darle a él un final feliz de pura vergüenza ajena y todo por contentar a fans intransigentes. Qué desastre.