De acuerdo a los cables liberados por WikiLeaks, el gobierno de Estados Unidos lleva tres años planeando derrocar al presidente de Egipto, Hosni Mubarack, por lo que los hechos que ocurren en la ciudad de El Cairo estarían dirigidos desde Washington. Esta situación se desprende de los archivos liberados por WikiLeaks en lo que ha sido la revelación más aterradora: cuánto ha mentido Estados Unidos al mundo.
Los archivos muestran que Washington estuvo respaldando secretamente a las principales figuras detrás de la revuelta, que ya arroja más de un centenar de muertos y más de 2.000 heridos desde que las protestas comenzaron el martes. WikiLeaks apunta con el dedo a Estados Unidos, acusándolo de tratar de cambiar la política del régimen egipcio.
El principal beneficio que obtiene Estados Unidos es el aumento del precio del petróleo, un hecho que obliga a demandar más dólares dado que todo el comercio mundial de petróleo se realiza en dólares. Esto hará subir la demanda de dólares, revitalizando la alicaída confianza en el billete verde y, por añadidura en el gobierno de Estados Unidos. Estos disturbios se producen a pocas semanas de las jornadas de caos vividas en Tunez, en las que murieron 80 personas lo que obligó al presidente a huir al exilio.
Egipto es un paìs altamente estratégico frente al tema del petróleo, pues no solo tienen relavancia los 662 mil barrile diarios que produce: sino que por el canal de Suez (ver imagen) transitan cerca de tres millones de barriles diarios tanto por transporte marítimo como por la tubería Sumed. Como puede apreciarse, se trata de una zona altamente explosiva cuya deriva entrará a complicar y a debilitar la feble recuperaciòn económica.Una mirada no convencional al neoliberalismo y la globalización