Todos los años por estas fechas el Paul Winter Consort celebra el solsticio de invierno en la catedral de Nueva York de esta forma:
La música de Paul Winter siempre me ha parecido especialmente alegre y optimista: justo la actitud que corresponde al solsticio de invierno, cuando el año empieza a salir de las tinieblas. Y no vale decir que no nos dejan ser optimistas: la actitud depende de nosotros.